«Torremaella» es el producto estrella de la Almazara Gil Egerique, que ha sido reconocido con el segundo premio del consejo Regulador de la DOP Bajo Aragón
El sabor del Bajo Aragón está en el aceite de Maella. Al menos eso es lo que aseguran desde el Consejo Regulador de la DOP Aceite del Bajo Aragón, que ha premiado a las mejores empresas oleícolas de todo el territorio. La Almazara Gil Egerique recibió este reconocimiento el pasado mes de abril por su «apuesta por la calidad y el gran sabor de sus productos».
Gil Egerique, almazara inscrita en la DOP Aceite del Bajo Aragón, es una empresa familiar situada en Maella que ha dedicado sus esfuerzos a la agricultura durante generaciones, respetando las tradiciones, cuidando el entorno y a su vez invirtiendo en las últimas tecnologías que hacen posible que sus aceites de oliva virgen extra Torremaella y Olivadella estén a la altura de los mejores zumos de oliva del Mediterráneo.
Su principal compromiso: cuidar con el máximo esmero sus campos y cada detalle del proceso productivo para poder ofrecer a sus clientes un aceite de oliva virgen extra de gran calidad y excelente sabor, gracias a la variedad de olivo empeltre, autóctona del Bajo Aragón.
El lugar donde recogen los frutos es el paraje Vall d´Algés, de una belleza singular, que representa la apuesta de la empresa por la calidad y la excelencia.
De tierra arcillosa y cálcica, este lugar está rodeado de hermosos pinares, plantas de romero y tomillo que aportan delicados matices y esencias al fruto. Allí se entremezclan la sabiduría de los olivos centenarios de la variedad empeltre con la energía de jóvenes olivos arbequinos. El tesoro mejor guardado de Gil Egerique es una pequeña plantación de la variedad Tosca, que ofrece una aceituna de sabor y cualidades excepcionales y con la que son pioneros en España.
«Este reconocimiento del Consejo Regulador ha sido una gran satisfacción y una sorpresa que no esperábamos, es un logro importante para nosotros», explica el gerente de la Almazara Gil Egerique, el maellano David Gil.
En los años 60, su abuelo materno, José Egerique, quien allá por los años 60 ya se dedicaba a la compra-venta de aceituna, almendra y otros frutos del campo. El padre de David , Jesús Zenón Gil, continuó con el negocio, y al terminar los estudios él se unió también. En ese momento, hace ya unos 22 años, decidieron montar una almazara.
El espíritu emprendedor de Jesús y su hijo, y su pasión por las técnicas de cultivo del olivo para la elaboración de un aceite de oliva de excelente calidad, hicieron que en 1996 viera realizados sus sueños con la incorporación de las nuevas tecnologías para la molturación del aceite.
Desde entonces, la Almazara Gil Egerique ofrece a los agricultores de la zona un servicio completo para el tratamiento de la aceituna y la extracción en frío de nuestro preciado aceite virgen extra.
Productos D.O.P
El aceite al que ha premiado el Consejo Regulador de la DOP ha sido el denominado como Torremaella, un «coupage» de las variedades empeltre y arbequina (80% empeltre y 20% de arbequina), reconocido como aceite virgen extra con denominación de origen protegida Bajo Aragón. Este aceite ya ha recibido otros reconocimientos como la Medalla de Oro en el Concurso Internacional de «Aove Terraolivo 2014» en Israel.
Esta almazara maellana cuenta con otros tesoros entre sus productos, como el Olivadella selección, un aceite virgen extra monovarietal de aceituna arbequina.
La clave para conseguir este oro líquido tan sobresaliente está en una cuidadosa selección, clasificación y control del proceso de producción y envasado, todo ello unido, por supuesto, a la experiencia y el mimo con el que trabaja esta empresa familiar.