El Ayuntamiento de Caspe, la parroquia y el arzobispado de Zaragoza han llegado a un acuerdo para actuar en las humedades que afectan a una buena parte de la Colegiata Santa María la Mayor de la Ciudad del Compromiso.
Debido a la urgente necesidad de actuar en la Capilla de Santiago, en una reciente reunión se acordó separar la obra y acometer una primera actuación que permita intervenir en la zona más necesitada. Los trabajos de urgencia se acordaron realizar mediante un convenio de actuación elaborado por el arzobispado en base a la memoria valorada que, dada la urgencia, aportan desde el ayuntamiento, tal y como detalla la alcaldesa de Caspe, Pilar Mustieles.
Esta actuación tendrá un presupuesto que ronda los 50.000 euros y se acometerá de forma urgente. Aún no se ha definido cuánto pagará cada institución pero la obra estará financiada en su mayor parte por el Arzobispado y el resto de forma equitativa por la parroquia y el propio consistorio caspolino.
Por otra parte, en la misma reunión se debatió el informe diagnóstico de la Colegiata realizado por la Complutense de Madrid en el que se marcaba el plan de acción para la correcta actuación de la rehabilitación. Los tres interlocutores se mostraron de acuerdo en cuanto a la viabilidad de este plan para el que se hace necesario encontrar la financiación más adecuada, ya que, con su ejecución se podría acometer una restauración definitiva.
En la cita se consensuaron los pasos a seguir para dar una solución rápida a las humedades que afectan a la Colegiata y que tanto preocupan a las tres entidades. Se acordó solicitar la ayuda del 1,5 % Cultural del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, al que el gobierno en su próxima convocatoria a previsto dedicar el 2%, para la conservación del patrimonio arquitectónico teniendo en cuenta que el proyecto encaja dentro de los criterios de selección y priorización para los que está destinada esta subvención.
En la reunión que se celebró en Zaragoza participaron la primer edil caspolina, Pilar Mustieles; el concejal de urbanismo del ayuntamiento de Caspe, Gabriel Luena; el párroco de Caspe, Samuel San Miguel y el ecónomo diocesano Joaquín Abellanas además del arquitecto de la entidad.