El Consistorio anuncia que la primera vía que se arreglará en 2018 es Cordel Montañés, repleta de baches que dañan los coches
El Ayuntamiento de Alcañiz ha finalizado los trabajos de reparación del camino de la Estanca y del camino de Andorra. Ambas obras se enmarcan dentro del Plan de Reparación de Caminos del año 2017 y se iniciaron a finales del año pasado. Los trabajos han consistido en el desbroce y retirado de la vegetación de las márgenes, la excavación en los lados para la formación de cunetas y la repavimentación de ambos caminos, según ha indicado el Consistorio en nota de prensa.
Además, en el de la Estanca se han realizado también obras complementarias, como la instalación de un tubo de drenaje en una zona que sufría encharcamientos y acumulación de agua. El tramo que se ha acondicionado y repavimentado se sitúa al oeste del casco urbano de Alcañiz, cerca de la variante de la carretera nacional N-232. Tiene una longitud de 1.050 metros y un ancho medio de 4,10 metros (varía entre los 3,10 y los 5,60 según el tramo).
Por su parte, el camino de Andorra está situado al oeste del casco urbano y tiene una longitud de 853 metros y un ancho medio de 3,60 metros. Los trabajos en esta vía se han dividido en dos tramos diferenciados. Por un lado, las zonas que se encontraban en peor estado, en las que se demolió el pavimento; y por otro, los tramos con buenas condiciones. En varias zonas, la vegetación que crece en las márgenes ejercía una presión sobre los bordes del pavimento, lo que ocasionaba que comenzara a levantarse. Además, en algunos tramos donde discurren acequias en los márgenes, la vegetación creció de forma significativa reduciendo la sección para la escorrentía de las aguas de riego, lo que afectaba negativamente al firme debido a las filtraciones que se producen.
En ambos caminos la actuación total se ha desarrollado sobre unos 1.000 metros, con anchuras que varían entre los tres y los cinco metros. El coste total de las obras asciende a 65.700 euros: 36.300 destinados al camino de la Estanca y 29.400 al de Andorra.
Con estas obras se consigue mejorar notablemente el estado de dichos caminos, aumentando la seguridad de los vehículos y evitando posibles averías en su mecánica, cuyo causante podían ser los socavones que se habían originado antes de la reparación. Cabe destacar que ambas vías son muy importantes para la ciudad, ya que son especialmente transitadas por agricultores y maquinaria pesada como tractores y remolques, entre otros.
El alcalde de Alcañiz, Juan Carlos Gracia Suso, se ha mostrado «muy satisfecho» por la ejecución de estos trabajos. «Los caminos han quedado en perfectas condiciones para su uso, lo que supone una mejora en la seguridad de los vehículos que circulan por ellos, que podían dañarse por los socavones y encharcamientos que se producían antes de las obras», ha destacado.
Los socavones inundan todo el camino
Asimismo, el primer edil ha avanzado que ya se está preparando el Plan de Reparación de Caminos para este 2018, que arrancará próximamente con la repavimentación del camino Cordel Montañés, muy demandado por los vecinos. Los socavones inundan prácticamente todo el camino, por lo que los coches no los pueden evitar apartándose a un lado. Son varios los residentes que han sufrido roturas del cárter, reventones de ruedas y pérdida del tubo de escape. Esta situación no es nueva y se prolonga desde hace casi 14 años. El verano pasado los vecinos recogieron más de 200 firmas tan solo con los residentes en la zona.