La hoguera ardió al caer la noche de una jornada que arrancó con la colocación de la Copa
Es un emblema en Castelnou el llamado Día de la Copa. El sábado se demostró el motivo, lo demostraron las decenas de personas que se arrimaron a ayudar para que la hoguera de su pueblo quedase como tiene que quedar por San Valero. Niños, mayores y jóvenes salieron al monte de buena mañana para traer la Copa y más revestimiento de madera para completar el enorme montículo de troncos que aguardaban en el centro de la plaza.
En la plaza, el resto del pueblo se unió para colaborar en la colocación de la Copa que preside la montaña de leña que se colocó días antes y a la que por la noche se le dio fuego. En ese momento, alegría y emoción fluyen a partes iguales mientras arde la hoguera.
Los astros se conjuraron para brindar a Castelnou y sus gentes una jornada apacible sin vientos y con mucho sol. Para este martes el pronóstico no es el mismo, con todo se honrará al patrón San Valero en el día señalado.
San Valero saldrá en procesión y en su honor se procesionarán y bendecirán panes benditos y ramilletes, un dulce que solo se puede degustar en Castelnou.