Las comarcas de Bajo Aragón, Andorra-Sierra de Arcos y Cuencas Mineras se han sumado al proyecto del Gobierno de Aragón para conseguir que la línea ferroviaria que se proyectó en su día para unir Alcañiz con Teruel sea una realidad como vía verde o camino natural. Llevará por nombre «Valfambra» y el objetivo es que conecte las localidades de Alcañiz –por donde pasa la Val de Zafán a Tortosa– , Calanda, Alcorisa, La Mata de los Olmos, Gargallo y Utrillas hasta llegar a Teruel.
Esta línea nunca llegó a ponerse en funcionamiento como ferroviaria. De hecho, su construcción comenzó y terminó a comienzos del pasado siglo XX sin dejar la infraestructura terminada. Pero queda el trazado y decenas de señales de lo que pudo haber sido y no fue, como por ejemplo, la estación de Alcorisa perfectamente visible desde la carretera N-420/N-211, ya que discurre de forma paralela.
Unir las dos ciudades más importantes en número de habitantes de la provincia a través de un sendero destinado al deporte de naturaleza es uno de los objetivos que se han marcado desde el Departamento de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón y también en las tres comarcas desde que recogieron de buen grado la propuesta. Los primeros 25 kilómetros que unen Teruel con Alfambra disponen de una subvención concedida de 1,5 millones procedente de una convocatoria de ayudas de movilidad con fondos europeos del ministerio de Transportes. Mientras se procede a ultimar el proyecto para comenzar las obras entre finales de este año y comienzos del próximo, ya se trabaja en la unión de Utrillas con Alcañiz. «Este tramo encaja en la convocatoria de ayudas para territorios afectados por la descarbonización y que están en zonas de influencia de la Térmica de Andorra, contactamos con las tres comarcas y enseguida mostraron su interés, así que ahora se está haciendo un trabajo coordinado para confeccionar el mejor proyecto posible», dijo el director de Carretera de la DGA en Teruel, Ignacio Belanche.
Se trata de un proyecto ambicioso. Calculan una inversión cercana a los 4,5 millones de euros para la vía completa y también es amplio en superficie. Además de conectar Alcañiz con Teruel, en la capital bajoaragonesa uniría con la vía verde Val de Zafán que llega desde La Puebla de Híjar en su kilómetro 0 y continúa desde Alcañiz hasta Tortosa con previsión de extenderse hasta el mar. En la zona sur, al llegar a Teruel desde Utrillas, conectaría con la vía verde de Ojos Negros, que enlaza a su vez Aragón con la Comunidad Valenciana. Así pues, de hacer realidad esta vía verde, la zona dispondría de un recorrido de unos 400 kilómetros en un trazado circular completo.
El entramado de conexiones se completaría en Cuencas Mineras porque uno de los proyectos del Gobierno de Aragón es que Utrillas sea punto de paso de lo que se ha planteado como Ruta Eurovelo y que uniría Lisboa con Toulouse pasando por Utrillas rumbo a Zaragoza. La capital aragonesa se presenta por su parte como nexo de unión del Mediterráneo con el Cantábrico a través del GR-99, camino natural del Ebro.
Fondos para la Transición Justa
Esta primavera podría ser una fecha clave para el proyecto de unir Alcañiz con Utrillas por el que se ha decidido apostar desde las administraciones. A finales de diciembre ya se regularon las bases a través del BOE para la concesión de ayudas en régimen de concurrencia competitiva dirigidas a proyectos de infraestructuras ambientales, sociales y digitales en municipios de zonas afectadas por la transición energética en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, y se procede a la convocatoria de las mismas. Está previsto que el MITECO publique la convocatoria de ayudas en los próximos meses.
El proyecto de «Valfambra» encaja concretamente en el artículo 5.C de estas bases, que recoge que «se pueden presentar infraestructuras ambientales para la puesta en valor del medio natural, la mejora de servicios ambientales y regeneración de las zonas. Entre ellas, el acondicionamiento o realización de caminos, senderos y paseos fluviales para la recuperación del patrimonio y recursos naturales». También encaja en el artículo 5.D. que incluye, entre otras variables, «la recuperación y uso alternativo de infraestructuras de transporte existente».
No es la primera vez que se ha puesto sobre la mesa este anhelo. De hecho, existe un informe que recoge todos los detalles de la situación y también la financiación estimada. «Precisamente porque es un proyecto muy ambicioso también económicamente, estamos en el momento idóneo para trabajar en él y presentarlo a la convocatoria de ayudas, nos encaja a la perfección, es la oportunidad perfecta», dice el presidente de la Comarca del Bajo Aragón, Luis Peralta.
Detalles de la vía «Valfambra»
Según detalla el informe del que ya disponen, «Valfambra» sería un sendero de más de 140 kilómetros que consta de tres grandes tramos: Teruel-Gargallo, que incluye Utrillas, con más de 95 kilómetros llenos de elementos conservados y otros que han desaparecido; Gargallo-Alcorisa, que incluye La Mata de los Olmos, que se trata de un tramo sin construir porque nunca se llegó a llevar a cabo la explanación de la línea ferroviaria. Aquí, aunque la unión por carretera son 26 kilómetros, una futura vía verde constaría de más. El tercer tramo es Alcorisa-Alcañiz, que consta de 35 kilómetros construidos pero, como en el caso del primero, también cuenta con secciones inacabadas y tramos que han desaparecido. En estos kilómetros la vía discurre además por Calanda «en una orografía suave y con una vía desdibujada en algunos puntos al no finalizarse las obras».
Para las zonas «más desdibujadas» o que se solapan con la carretera, el propio informe ya prevé trazados alternativos que discurren de manera paralela. Hay túneles y otras infraestructuras que no será posible salvar pero otras muchas, sí.
Bajo Aragón
La comarca que más porcentaje posee es la del Bajo Aragón, en cuyo pleno de febrero se dio apoyo a que la vía verde o camino natural «Valfambra» salga adelante. Se hizo mediante una Declaración Institucional para impulsar una solicitud conjunta para este proyecto. «Siempre que se ha tratado este tema ha habido unanimidad porque es algo muy bueno para el territorio. Si lo pudiésemos dejar encaminado sería todo un logro porque si nos lo concediesen tendríamos un plazo de ejecución hasta 2026», comenta Luis Peralta. «Además de que existe un informe técnico, hay datos y hechos de zonas vecinas, no nos inventamos nada. Nos hemos reunido con sitios como Gerona, por ejemplo, y los resultados de impacto económico son bestiales, porque además de los visitantes, se genera tejido empresarial en torno a la bicicleta, de hostelería, albergues y todo lo que tiene que ver con el turismo natural. Es importante involucrar a la empresa privada también», reflexiona.
A la vecina comarca catalana se la considera también un ejemplo en la gestión una vez está construida y en funcionamiento la vía verde o camino natural, algo fundamental y que reivindican en otras vías como la Val de Zafán sin ir más lejos. La constitución de un consorcio para asegurar su mantenimiento y difusión podría ser una opción, se trata de una figura similar a la que ya existe en el territorio como es el consorcio Ibero o el del Geoparque. «Es cuestión de ver cuál es la mejor fórmula pero está claro que después de hacerla tenemos que seguir unidos y contribuir al mantenimiento», añade.
Andorra-Sierra de Arcos
Desde las comarcas coinciden en destacar la unión que existe entre las entidades y el Gobierno de Aragón. Para la Comarca Andorra-Sierra de Arcos esta posible vía verde vendría a reforzar el plan turístico en torno al medio natural y patrimonial por el que están apostando. De hecho, entre otros objetivos, uno es hacer ciclable toda la comarca. Cabe recordar que hace tiempo ya pusieron en marcha varias rutas BTT junto a Adibama y la Comarca del Bajo Martín. «Estamos contentos e ilusionados. Tenemos apenas una decena de kilómetros en «Valfambra» pero somos el nexo de unión entre las comarcas y es interesante porque nos unirían a su vez con otras rutas muy importantes a nivel ciclista», dice la presidenta, Marta Sancho.
En este caso, la línea no existe porque no se llegó a construir, sin embargo, es viable habilitar una vía verde o camino natural. «Si es en terrenos municipales, sería más sencillo pero se estudiarán las alternativas porque posibilidades, hay», añade Sancho, que califica «de importantes» estos kilómetros que pasarían por la comarca andorrana porque serían un buen complemento para otra vía. «Para nosotros sería interesante recuperar como vía verde la antigua línea de tren del Museo Minero de Andorra a Escatrón, donde habría que hacer una recuperación de limpieza y desbroce pero el tramo está bien porque funcionó. Tendríamos dos vías verdes interesantes», añade.
Cuencas Mineras
Este tramo es la segunda parte de la vía verde que llevan proyectada en Cuencas Mineras desde hace años que une Teruel-Utrillas-Zaragoza. «Podríamos empalmar desde Utrillas con esta de Valfambra, para a su vez conectar con la Val de Zafán», explica el presidente, José María Merino. Hacer realidad Valfambra supondría tener «un proyecto muy importante que conectaría el Mediterráneo con el Cantábrico y en Utrillas, con la Ruta que tiene proyectada el Gobierno de Aragón que une Toulouse-Teruel-Lisboa, así que, creo que estamos hablando de palabras mayores», añade. Merino recuerda que, en Cuencas Mineras se encuentran inmersos en la preparación de 27 rutas cicloturistas interiores, que completarían a toda esta nueva oferta.
En la zona funcionan tramos parciales de vía verde. Concretamente, uno que une Utrillas con Martín del Río por el trazado del ferrocarril minero y que se une con una parte del ferrocarril que iba de Utrillas a Zaragoza. «Lo emplea mucha gente como la famosa ruta del colesterol», sonríe. Está asfaltada en parte, se realizaron mejoras y además, pasa el GR-262. Pendiente queda hacer realidad la vía verde que sale a Zaragoza. «Estamos convencidos de que saldrá adelante y Valfambra sería muy interesante porque lo importante es conectarnos con Tarragona, Zaragoza y Teruel, porque dejar zonas aisladas no llevan a ninguna parte», concluye.
Interesante proyecto. A ver si sale adelante en poco tiempo y no se queda en proyecto y buenas intenciones!,
Una autovía?
Más valdría gastar ese dinero para mejorar las comunicaciones o para traer empresas para evitar que las personas se vallan de los pueblos a las ciudades
Y para cuando el tramo desde la Puebla de Hijar a Valdealgorfa? Da pena su estado. Y otra cosa, en qué cabeza cabe plantear esta fantástica idea a la vez que destrozar la provincia de Teruel con molinos, líneas de alta tensión, centralitas, desmontes, caminos anchos para el paso de los camiones, etc… pero qué atractivo és ese? Menudas mentes pensantes.
Hace falta otro chiringuito que ahí pocos!!!!! Que vergüenza de pais
¿Qué chiringuito? Es una vía ciclista..
Si tan sólo se os ocurre invertir en «turismo» y «ciclismo» os vais a comer lo que yo me sé
Que bruto . Pero algo de razón llevas . Ahora todo es pista y bicicleta. Les ha dado por ahí. Eso si Molinos a derecha e izquierda . Va a quedar de cojon.
Esa fotografía del artículo. Al fondo . Lo que pudo ser la Estacion Ferrocarril de Alcorisa . Que se divida perfectamente desde la carretera A/223 Andorra /Alcorisa . Existe un trabajo estudio de rehabilitación de esa estación. Hotel / Restaurante .
Saludos desde Andorra
Y quien va querer ir con lo majo que va quedar el paisaje lleno de placas y molinos
Muy largo el párrafo y solo hay una respuesta: elecciones.
Es importante involucrar a la empresa privada también», reflexiona. Importante no, importantísimo.
Todo muy bien me parece pero hay proyectos que habría que terminar y que pienso que nunca se harán como la autovía que es más necesaria
Los resultados de impacto económico son bestiales, porque además de los visitantes, se genera tejido empresarial en torno a la bicicleta, de hostelería, albergues y todo lo que tiene que ver con el turismo natural. Es importante involucrar a la empresa privada también», reflexiona. Las autovías y carreteras ya están hechas y funcionando, lo que no está terminado es la vía turística y el aprovechamiento de las viejas estaciones, algunas con casi un siglo de vida.