KineActiv es un proyecto de rehabilitación virtual que nace en Teruel de la mano de las empresas turolenses Edison Desarrollos y Hotel Balneario de Ariño. Su objetivo es acercar la medicina y la terapia física a la España vaciada para combatir el sedentarismo y el envejecimiento prematuro facilitando una tecnología adaptada al hogar de las personas mayores. Hasta el momento, las dos empresas han invertido en el proyecto más de 200.000 euros y ahora, vivirán un empujón al haber sido seleccionados por la aceleradora de empresas impulsada por Juan Roig, presidente de Mercadona, para su fase «Start». En la convocatoria, denominada Lanzadera, competían con más de 1.100 iniciativas.
Para Gabriel Fuertes, CEO de Edison Desarrollos, el respaldo de Lanzadera «supone un reconocimiento e impulso al trabajo de estos últimos años, y sobre todo una oportunidad muy importante para afianzarnos y entrar con más presencia en el mercado, ya que sin su respaldo nos costaría mucho más posicionar KineActiv como una herramienta de referencia en el sector de la telemedicina». Fuertes recuerda que detrás de este proyecto hay años de trabajo y de investigación que comenzaron en el CEEI de Teruel, desde donde les apoyaron como proyecto de emprendimiento en innovación tecnológica. «Pero hay un punto de inflexión que es cuando conoces a personas o entidades que creen en ti y en el proyecto, como es el caso de Pedro Villanueva y el Balneario de Ariño, y que, sobre todo, nos ofrecen una nueva visión y experiencia de mercado», explica.
Los dos empresarios estrecharon lazos en Suecia, en una feria de salud de proyectos innovadores. Pedro Villanueva, director del Hotel Balneario de Ariño, explica cómo comenzaron a establecer las sinergias. «Por una parte, vimos la tecnología que ya tenían desarrollada y que necesitaba una adaptación, y, por otra parte, vimos lo que es el balneario como centro de formación y preparación para llegar a familiarizar esa tecnología con los potenciales pacientes y poderles hacer el seguimiento con nuestro equipo de médicos y fisioterapeutas», detalla Villanueva.
En el origen de la colaboración, trabajaron para complementar los tratamientos con hidroterapia que reciben los pacientes en el balneario, con el objetivo de alargar en el tiempo sus beneficios. Pero llegó la pandemia. «Aquí aparece otra realidad. Que las personas mayores que viven aisladas o que viven solas están teniendo secuelas muy graves en cuanto al grado de fragilidad de su salud, física y psicológica, ya que pierden el contacto con la realidad y el tono muscular», indica. «Se está trabajando actualmente en un giro del proyecto inicial para adaptarnos a esta nueva situación y ofrecer a los mayores del medio rural soluciones que las personas del rango de 70 a 85 años puedan recuperarse y no adelantar el deterioro de su salud por la situación que se está produciendo por el confinamiento», añade.
En su opinión, con KineActiv se aporta una solución a la economía global. «Si retrasamos la fragilidad de los pacientes no van a requerir antes de servicios a la dependencia y se reduce el gasto sanitario. Es una herramienta que lo que pretende es evitar la quiebra del sistema sanitario público, un objetivo ambicioso, pero como lo es el propio proyecto, con visión de futuro y a escala internacional», concluye.