El Balneario de Ariño está preparando un nuevo proyecto encaminado a mejorar su eficiencia energética y reducir a cero las emisiones de dióxido de carbono, en su empeño por mejorar la sostenibilidad del proyecto y por consolidarse como referente de turismo sostenible.
Su gerente, Pedro Villanueva, se encuentra inmerso en la elaboración de un proyecto de futuro que consiste en la construcción de un parque fotovoltaico integrado en las instalaciones del centro termal. Esta iniciativa, que se está trabajando desde hace meses con un equipo de ingenieros de Valencia y que ya ha sido presentado en el Ministerio de Transición Energética, permitiría convertir al centro termal de Ariño en el primer balneario europeo que apueste por el autoconsumo.
Para llevarlo a cabo, se requeriría una inversión aproximada de 1,3 millones de euros. Intentarán recurrir a fondos de la transición ecológica. «Nuestros consumos energéticos son muy elevados por el modelo constructivo y no nos podemos permitir consumos así en estos momentos de ahorro energético », destaca Villanueva, que añade que este proyecto forma parte de la política de responsabilidad social de la empresa.
«La idea es hacer una gran construcción por la que vamos a vender energía durante el día que podemos consumir durante la noche. No emitiríamos CO2 porque nunca gastaríamos más de lo que produciríamos», destaca. «Será el primer balneario en el que podríamos vivir, entre comillas, aislados de la red eléctrica», concluye.