Los calandinos celebraron el día de la Tercera Edad con jotas, comida de hermandad y baile
Las fiestas del Pilar de Calanda concluyeron oficialmente el pasado domingo 15 de octubre pero con una tarea pendiente. El broche final que, como cada año, es el homenaje a la Tercera Edad que la localidad hace a sus mayores el sábado posterior. De este modo, un total de 110 socios del Hogar del Personas Mayores protagonizaron el sábado una jornada de hermanamiento y diversión en la que no faltaron las jotas, un buen menú y el baile. Hubo representación municipal, presidida por el alcalde, José Ramón Ibáñez, y estuvieron las Reinas de las Fiestas.
La jornada comenzó a las doce con una misa baturra en el Templo del Pilar en la que actuó el coro del Hogar. Continuó con la comida de hermandad y concluyó con la actuación del duo «Mas Music». «Es un día grande. El Ayuntamiento nos brinda un homenaje y nosotros disfrutamos mucho. Siempre se celebra después de las fiestas porque sino se juntan muchos actos al mismo tiempo», dijo Dolores Urrios, la presidenta de la asociación de la Tercera Edad de Calanda, que aprovechó la ocasión para invitar a todos los calandinos a seguir participando en las actividades que se van programando así como en el día a día del centro. «Estamos 800 socios y, aunque no venimos todos, todos los días, el Hogar siempre está lleno de gente», subrayó.
Urrios enumeró decenas de actividades que durante toda la semana se realizan en el centro. Desde gimnasia hasta talleres de lectura, teatro, informática y clases de canto. «Todos los días tenemos una cosa u otra. Además también se juega a las cartas, al billar y al futbolín», recalcó Dolores, que apuesta por seguir trabajando para mantener el centro y crecer en socios.