El consistorio de la Cañada de Benatanduz está rehabilitando el antiguo Ayuntamiento para construir ahí una oficina de turismo y un salón polivalente donde poder hacer charlas, exposiciones y servir de salón de reuniones para jubilados. Las obras se están llevando a cabo gracias a una partida presupuestaria de 120.000 euros provenientes del FITE y estarán terminadas el 30 de junio. Desde entonces se abrirá la oficina de turismo que contará con un trabajador a tiempo parcial.
El edificio es de gran importancia para los 35 vecinos, ya que el municipio no dispone de ningún local donde reunirse, y apenas cuenta con servicios enfocados al turismo. Por ello y el aumento de turismo, especialmente motero, ambos servicios son muy demandados. «Estamos viendo que con la Silent Route la gente viene y quiere ver el pueblo. Nos preguntan por un sitio donde informarse y conocer la historia, hay una gran demanda, por lo que seguro que tendrá su clientela», explica Servando Gascón, alcalde del municipio, quién también señala que atraería a más personas, además de garantizarles el servicio y el máximo disfrute de los atractivos municipales.
Se prevé que en verano esté ya en funcionamiento, cuando se espera poder inaugurarlo, para atender a uno de los momentos de más turismo. «Queremos que la oficina se ponga en funcionamiento lo antes posible y acoger esos turistas que vengan en verano. También en el local puede faltar algún detalle de mobiliario, pero estará listo», subraya el primer edil. La oficina requerirá de una persona a tiempo parcial en fines de semana, puentes y temporadas de más afluencia. Sin embargo, desde el consistorio apuntan que no tendrán problema para cubrir el puesto.
Gran demanda
Hasta ahora el local del antiguo Ayuntamiento estaba cerrado, sin un uso habitual, por lo que desde el consistorio buscan darle un aprovechamiento y mantener también en buen estado el edificio que es de lo poco que queda del antiguo pueblo. «Es fundamental recuperar la historia del municipio, y para darla a conocer pedimos el FITE, porque un municipio como el nuestro, si no recibe subvenciones no se puede permitir obras así de gran magnitud», remarca Gascón.
Las obras están en marcha desde mitad marzo, y hasta el 30 de junio se pretende rehabilitar el espacio, acondicionarlo conservando también la historia del edificio. Hasta ahora, la empresa adjudicataria ha trabajado en la fachada, y los próximos trabajos estarán enfocados en el interior, con la construcción de baños y accesos para minusválidos. La antigua casa consistorial de 1540 se ubica en el barrio de La Villa, junto a los edificios más monumentales como la iglesia de la Asunción y el Hospital de los Pobres, unidos por las lonjas. Además del horno, casonas y la escuela antigua recuperada recientemente.
Con la puesta en marcha del local y la oficina turística, el pueblo continuará trabajando en la creación y mantenimiento de servicios básicos, que en pequeñas localidades continúa costando «mucho esfuerzo» crearlos y conservarlos, a pesar de las ayudas recibidas y las buenas intenciones de vecinos y representantes políticos.