18 familias no pueden pasar este martes por la noche en sus casas por precaución debido a los efectos del temporal en Alcañiz. 15 de ellas, residentes en el Corcho, han sido desalojadas debido a un nuevo derrumbe en el cerro Pui Pinos y otras tres por la grieta de la Ronda de Caspe. Ambas vías se han cortado al tráfico por lo que no se puede circular por ninguna de las dos principales circunvalaciones de la ciudad.
También se ha cortado la carretera de Castelserás debido a que se ha producido un desprendimiento a un kilómetro del puente de La Alberta.
Los afectados de la zona de Pui Pinos son los vecinos del conocido como edificio de Mapfre y los de las casas situadas debajo del talud, que ya fueron desalojados cuando se produjo el importante derrumbe de abril de 2017. También una familia de la zona del Loreto por recomendación de los bomberos. Algunos de ellos regresaron a sus vivienda hace tan solo unos meses después de las obras de emergencia del cerro.
Según indica la Diputación de Teruel, aunque el aviso inicial había sido por un pequeño desprendimiento en la acera, cuando han llegado los efectivos se ha producido otro mayor y han comprobado que se había roto una tubería de agua que estaba provocando un agujero del terreno que podía poner en riesgo el resto del terreno. En cuanto a la parte superior del cerro, la que se derrumbó y en la que se han realizado actuaciones de seguridad, las escorrentías estás funcionando bien.
Los Bomberos han balizado la zona y tras evaluar la situación han ordenado desalojar por prevención a las familias, que el Ayuntamiento ha reubicado. Algunos han optado por marcharse a viviendas de familiares y otros a los hoteles sufragados por el Consistorio. Los bomberos han realizado después un muro de contención con sacos de arena para desviar toda el agua que salía, además de ordenar el corte del agua.
La dirección del Parque de Bomberos de Alcañiz se ha reunido el martes por la tarde con el Ayuntamiento, Policía Local, Brigada Municipal y Guardia Civil para coordinar las actuaciones en la capital del Bajo Aragón, y se están estudiando distintas zonas del municipio por los efectos que puedan tener el deshielo y las lluvias intensas de la jornada en la estabilidad del terreno o filtraciones de agua en viviendas.
Tras el suceso se ha informado a la Dirección General de Carreteras para solicitar la ejecución de una actuación de emergencia y consolidar el talud. El Ayuntamiento ha quedado a la espera de una respuesta de Fomento para saber qué medidas se toman.
También personal del Ayuntamiento esta realizando visitas por el casco histórico evaluando si las lluvias están afectando a viviendas deshabitadas.
Respecto a la Ronda de Caspe, los desalojos se han producido debido a una grieta que ya se conocía y que se estaba supervisando. Con el temporal se ha visto que se ha hundido más y por precaución se ha decidido cerrar la vía al tráfico y trasladar a las tres familias, un matrimonio que reside en el camino del Ciprés y dos familias de la ronda. Este miércoles por la mañana los técnicos que siguen la evolución de la grieta estudiarán su evolución.
Alerta por la crecida del río
Desde el Consistorio alcañizano también han lanzado un aviso a todos los vecinos por la posible crecida del río Guadalope el martes por la tarde. Por ello, aconsejan no transitar cerca de la orilla. Si bien la situación se considera controlada, se ruega a la población precaución y no acercarse a la zona de la ribera.
En función de la evolución del cauce, las fuerzas de seguridad evaluarán la situación y si es necesario, proceder a modificar la circulación.
Los bomberos han balizado también toda la zona del entorno del río a su paso por el casco urbano para prohibir el acceso de los vecinos y garantizar así la seguridad en la zona.
Respecto a las incidencias, este martes se han producido varias caídas de árboles. Se han realizado cortes de pinos que presentan riesgo de caída en zonas sensibles como el entorno de la guardería o de la estación de autobuses, entre otras. Se han caído dos pinos en la subida al Parador y se ha producido un desprendimiento de rocas en el primer túnel. En ambos casos se han solucionado los problemas en un tiempo máximo de un cuarto de hora.
Protocolo de trabajo
Respeto a la limpieza de la ciudad, el Ayuntamiento trabaja en coordinación con la brigada municipal, empresas y agricultores voluntarios. La lluvia impide echar sal este martes por lo que alrededor de 15 trabajadores de la Brigada han trabajado con palas y cepillos haciendo «caminos» por las aceras siguiendo el mismo protocolo que el lunes.
Los mayores problemas se han producido este martes en el acceso al interior del polígono Las Horcas. El Ayuntamiento ha contratado camiones y máquinas de dos empresas para limpiar las calles de la zona industrial ya que empresas como Gallina Blanca han estado a punto de parar su línea de producción. También han ayudado a un camión que se había quedado cruzado con los Bomberos.
En previsión de la nevada, la semana pasada el Consistorio adquirió decenas de miles de kilos de sal y la brigada municipal se dedica desde el lunes en exclusiva al temporal. 15 operarios estuvieron el lunes echando sal por las calles comenzando por los puntos más sensibles como los colegios, centro de salud, Hospital… y siguiendo por zonas con pendiente y el resto de calles (de las más a las menos concurridas). También se ha contado con la colaboración de una empresa y de los agricultores de la cooperativa de Pueyos, que el lunes por la tarde echaron sal con sus vehículos para que la nieve no se helara.
Asimismo, el servicio de limpieza con seis operarios ha limpiado la
tapa de los contenedores e introduciendo la basura que las personas que dejaron las bolsas en las aceras.
Ferminer dice
Dice LC que no se han producido daños. Lo dice así en el titular, en la letra grande que la gente lee. Luego concreta para que nadie diga… no se han produdido daños… personales. Me gustaría saber qué diferencia encuentra este periódico entre los daños que se produjeron hace unos cuantos años y los que se han producido en el día de hoy, ya que, a Dios gracias, en ninguno se han tenido que lamentar daños personales.