Samper de Calanda acogió ayer su romería más tradicional con la asistencia de un gran número de vecinos y visitantes
Después de que decenas de samperinos saliesen en procesión este miércoles por las calles del casco urbano junto a Santa Quiteria, llegó el turno el sábado de acudir a la ermita con la tradicional romería.
Jóvenes, niños y adultos participaron activamente en el momento de sacar a la santa de la parroquia de El Salvador y llevarla por las calles de la localidad hasta el lugar donde se halla la ermita, a unos pocos kilómetros.
El buen clima se vio levemente empañado por el viento, aunque eso no impidió que fuesen muchos los que participasen tanto en la romería, como en la misa y en el posterior almuerzo de judías blancas con conejo. Muchas cuadrillas se repartieron por los alrededores de la ermita con mesas para disfrutar de una buena comida de hermandad.
Como novedad, este año la misa se celebró en el interior de la ermita, lo contrario que lo que suele suceder la mayoría de ocasiones, ya que se suele hacer en la escalinata de la puerta a la luz del sol.
«Este es un día de muy buen ambiente y familiar que ningún samperino se pierde», explicó el alcalde Alfonso Pérez. «Es un buen final para la semana cultural, que ha funcionado muy bien con un alto grado de participación».
Semana Cultural
El pasado 22 de mayo Samper aglutinó los actos más solemnes en torno a la santa. Tras la procesión le siguió una misa baturra con la A. C. Rondalla Compromiso de Caspe y un día completo de actividad. Exposiciones, animación infantil y cena fueron algunos de los actos programados.
El jueves por la tarde se organizaron varias charlas con el APN Javier Escorza que habló sobre los incendios, y José Nebot, de cómo actuar con una persona con quemaduras. También hubo cuentacuentos de sensibilización contra la violencia de género, y se habló sobre el yoga.