Rocco Verdult van Heeswijk ha llevado el wifi a Helmond con un sistema en el que Calanda tiene su protagonismo
Calcula que visita el Bajo Aragón entre cuatro o cinco veces al año. Tiene dos buenos motivos en Calanda llamados Dick y Maria, sus sus padres. Una de las suertes de Rocco fue crecer en una familia llena de arte e ingenio.
Es holandés y en Eindhoven tiene su centro de operaciones en el estudio que creó en 2009, un año después de graduarse con un premio por su talento. Ha heredado todo lo bueno del ambiente familiar para dirigir su vida al diseño social. «Me dedico a diseñar momentos, experiencias», dice. «No diseño una mesa, o sí, pero si la hago debe tener una función social. Todo lo que hago lo tiene», explica.
Para entenderlo solo hay que reparar en su última acción. La ha desarrollado en Helmond, una ciudad holandesa de unos 90.000 habitantes por encargo de la Biblioteca Helmond-Peel. Había que atraer a los jóvenes y tras comprobar que lo que más valoraban era Internet, pensaron en que debían llenar las calles de señal. «Es tan importante que muchos se iban a una ciudad cercana porque allí sí que hay», dice.
Se propuso llevar el wifi al centro de Helmond y lo ha conseguido gracias a la ayuda de los mayores. «Entró un anciano con un andador y algo me despertó en la cabeza. Miré por la ventana y vi que había más y más y más y ahí encontré la solución», rememora.
Mayores con andadores con wifi y jóvenes conectados en Helmond. / Studio Rocco Verdult
Varios ancianos se presentaron voluntarios para salir a la calle con andadores dotados con wifi identificados con colores flúor, algo que ya llamó la atención enseguida. Los jóvenes empezaron a detectar una señal de Internet buena, rápida y segura.
Para hacer uso de ella solo deben acercarse y preguntar la contraseña dando pie en muchas ocasiones a largas conversaciones entre niños y ancianos. El proyecto se llama Wandelende – WiFi (Wifi de Paseo) y la clave es elkevrijdag (cadaviernes).
Tras seis semanas de prueba, la conexión regresará en primavera cuando la climatología permita a los mayores pasear con más frecuencia y se hagan las mejoras necesarias.
Con esta propuesta, Rocco ha conseguido el primer objetivo de llevar el wifi a la ciudad al mismo tiempo que ha logrado un bien social como es sacar a los mayores a la calle. «Hay mucha población mayor que se queda en casa cuando enviuda y esto es un aliciente extra para que salgan», explica.
El tercer logro ha sido conectar generaciones aunque Rocco insiste en que no es ni un experimento ni se obliga a nadie a hablar con nadie. «Sí que se dan situaciones divertidas y además, los jóvenes les hacen ver lo necesario de Internet, como para encontrar información o ubicaciones y se llevan de los ancianos experiencias de vida», cuenta.
Rocco Verdult. / Mike Roelofs
La importancia de Calanda
Rocco vivió un año en Calanda. Era el 2000 cuando sentado en un bar de la plaza pidió la clave de wifi. Debía introducir «pideuncafé». «Aquello me hizo ver que con una contraseña puedes dar un mensaje», dice. Por eso, la clave de su proyecto es «cadaviernes» ya que es el día en el que salen los andadores a las calles.
Los viajes son parte fundamental en su vida y por eso atesora infinidad de fotografías que se pueden ver en su Instagram. Estampas bajoaragonesas y especialmente calandinas, tienen un lugar destacado. De hecho, es muy activo en redes sociales. A través de su Instagram personal (www.instagram.com/roccoverdult/) o del profesional sobre el proyecto (www.instagram.com/stadskunstenaarhelmond/) y por supuesto, su página web con todos los proyectos y trabajos realizados: www.roccoverdult.nl
«Mi experiencia vital allí durante un año y todas las estancias me han ayudado en todo proceso posterior en mi carrera», reconoce.
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andadores para ancianos dice
Me parece algo maravilloso! Que se pueda crear esa interacción generacional , atraves del wifi de los andadores para ancianos. Fantastica idea!
Un saludo
Kuidadores.es