Concha Lasso enseña ballet en Alcañiz desde hace 15 años. Comenzó bailando jotas cuando era niña y con 10 años se decantó por la danza clásica y entró en el conservatorio municipal de Zaragoza. Más tarde, cursó la carrera de danza clásica en el Conservatorio Superior de Danza ‘María de Ávila’ de Madrid, donde estuvo ocho años hasta que a la edad de 20 se marchó a trabajar de manera profesional a los teatros de Alemania. En 2005 volvió a España y poco después llegó a la capital bajoragonesa, donde les infunde a sus alumnas «su amor tan grande» por la danza. «Cuando bailo siento libertad, amor por la vida. No puedo odiar, no puedo pensar, solo puedo sentir, vibrar y compartir. Todo lo que me llena la danza después, en otros ámbitos de mi vida, se lo puedo enseñar a mis hijos, a mis familiares, a mis amigos», cuenta Concha.
Este jueves 29 de abril se ha celebrado el Día Internacional de la Danza, declarado en 1982 por la Unesco a petición del Comité Internacional de la Danza. Concha ha reivindicando la fecha bailando junto a sus niñas, que son junto a su música y su academia «el motor que permite que su proyecto siga adelante en Alcañiz».