Una mala señalización en la rotonda provisional que da acceso a la localidad provoca un sinfín de incidencias
Malestar entre los vecinos de Torre de Arcas tras varios meses de incidencias causadas por una confusa señalización en el desvío provisional mediante el cual, de manera provisional, se accede a la localidad desde la N-232.
El error en las indicaciones en dicho punto provoca que a diario decenas de conductores que circulan con sentido hacia Castellón, tomen por error la salida a la carretera TE-V-8411 con destino Torre de Arcas en lugar de continuar por la N-232. Los conductores caen en el error una vez llegan al casco urbano de la localidad en donde muere la vía y se ven obligados a dar la vuelta. El mayor problema, explican, se da cuando es un camión de grandes dimensiones el que toma el desvío equivocado. Los vehículos, algunos de ellos de gran tonelaje, llegan a la entrada de la localidad donde apenas tienen espacio para dar la vuelta. Tan solo después de complejas y costosas maniobras en el entorno de la báscula municipal, los conductores pueden lograr abandonar el cuello de botella que se encuentran al llegar a Torre de Arcas. «Estamos preocupados porque además de los turismos que se equivocan, tenemos todas las semanas 5 o 6 trailers que llegan y no pueden dar la vuelta», asegura Juan Carlos Arrufat, alcalde de Torre de Arcas.
Precisamente hace escasos días uno de los camiones derribó una valla de una finca contigua a la báscula. Al parecer los vecinos escucharon un estruendo y vieron a un camión de gran tonelaje saliendo de la localidad sin que diese tiempo a identificarlo. Hasta el momento no se ha dado con el paradero y tampoco el conductor se ha puesto en contacto con el propietario. «Nos tememos que con el aumento de tráfico en verano tengamos más problemas de este tipo», añadió Arrufat. La localidad, que tan solo dista 1 kilómetro de la N-232, lleva viviendo esta situación desde que hace tres meses se desviase el tráfico, de manera provisional, por una de las rotondas que servirá, una finalicen las obras, para servir de enlace entre la carretera de Torre de Arcas y la N-232 evitando el peligroso Stop que hasta el momento regulaba la intersección. Demandan por ello que se señalice correctamente el desvío y no como hasta ahora.
Final de obra previsto en verano
Tras manifestar su queja a la dirección de la obra, el consistorio obtuvo por respuesta que la situación se normalizará «dentro de 3 meses» una vez se ponga en marcha el tramo definitivo, algo que no ha contentado a los vecinos.
Sin embargo, y pese al lógico malestar del consistorio, la respuesta parece confirmar el compromiso del Ministerio de Fomento de que los trabajos de los 14 kilómetros desde el cruce de Ráfales hasta el límite de las provincias de Teruel y Castellón estarían listos en verano, después de que, cabe recordar, se retrasase la entrega de la obra por segunda vez. Las previsiones iniciales de Fomento contemplaban que el tramo estaría listo en julio de 2017.
Asimismo, continuan las obras del parquin de Monroyo que, pese a la negativa de la compañía telefónica de retirar la caseta que alberga la centralita del pueblo, estará operativo justo en el momento en el que se ponga en marcha el tramo de nueva carretera que incluye la variante de Monroyo mediante un túnel de 455 metros de longitud.
De este modo el territorio se mantiene expectante ante el previsible aumento de tráfico que experimentará la carretera y que coincidirá con la época estival en la que se producen un gran número de desplazamientos entre el Norte del país y el valle del Ebro con destino a las costas de la Comunidad Valenciana.
Quedará sin embargo pendiente la puesta en marcha del Puerto de Querol, actualmente en obras y del tramo Morella-La Torreta pendiente ejecución. Todo ello después de que el accidente de un camión haya obligado a cerrar esta pasada madrugada el Pont de la Bota.