Robaron en naves industriales y comerciales de Alcañiz, Andorra, Alcorisa, Albalate del Arzobispo y La Puebla de Hijar
La Guardia Civil, en el marco de la operación «REARAS», ha desarticulado un grupo criminal dedicado al robo de naves industriales y comerciales en el Bajo Aragón Histórico. Las investigaciones se iniciaron hace varios meses al tenerse noticias de la existencia de un grupo de personas originarias del este de Europa que podrían integrar un grupo criminal que tenía su «base de operaciones» en la localidad de Alcorisa, lugar en el que planificarían el robo en multitud de naves industriales y comerciales de todo el Bajo Aragón Histórico como los perpetrados en Alcañiz, Andorra, Alcorisa, Albalate del Arzobispo y La Puebla de Hijar.
En el transcurso de la investigación desarrollada por el Equipo Territorial de Policía Judicial de la Guardia Civil de Alcañiz los investigados abandonaron la localidad de Alcorisa. Aún así, los agentes lograron localizarlos en Tolosa (Guipúzcoa) lugar hasta el que se desplazaron para practicar las detenciones y registros domiciliarios.
Hay 2 personas detenidas de 23 y 25 años a los que se les imputan los supuestos delitos de pertenencia a grupo criminal y robos con fuerza. A los detenidos se les atribuye la supuesta comisión de 45 delitos contra el patrimonio.
En los registros domiciliarios realizados en Tolosa se intervinieron alguno de los efectos presuntamente sustraídos, así como emisoras radiofrecuencia que el grupo criminal utilizaría para comunicarse durante la perpetración de sus «golpes». También se lograron hallar indicios que a juicio de los investigadores probarían la autoría de los hechos.
Modus Operandi
Principalmente actuaban en los polígonos industriales de las localidades más cercanas al lugar de residencia en las que seleccionaban su objetivo entre naves industriales de empresas dedicadas a la distribución de bebidas, talleres, almacenes agrícolas e industriales, plantas de tratamiento áridos, minas, etc…
Aprovechaban las horas nocturnas. En una misma noche accedían a varias naves industriales utilizando varios vehículos para proporcionarles seguridad a la hora de cometer los robos y además obtener apoyo logístico para transportar el material robado, participando entre tres y cinco miembros del grupo en función de la envergadura del robo planificado.
Para facilitar su huída una vez cometida su acción, el grupo se dividía para dificultar su detección y detención por fuerzas policiales y guardar en lugar «seguro» los objetos sustraídos.
Modo de acceso a las naves
Los integrantes del grupo criminal accedían a las naves industriales de dos formas. La más frecuente era forzar alguna ventana o puerta. Sin embargo, otro método más especializado que utilizaron fue practicar butrones en los tejados o paredes de las naves para poder visualizar el interior de la nave y estudiar la forma de inutilizar los sistemas de seguridad instalados.
Una vez en el interior de la instalación sustraían dinero en metálico y efectos de naturaleza muy diversa como: cajas de bebidas alcohólicas, herramientas de mano y eléctricas, latas de conserva, ordenadores, máquinas para diagnosis, cable de cobre, cámaras de fotos, medicamentos, productos de higiene, gasoil e incluso vehículos para el traslado de los efectos robados.
La operación ha sido desarrollada por la Comandancia de la Guardia Civil de Teruel, contando con la colaboración de la Guardia Civil de San Sebastián y la Policía Autónoma Vasca y dirigida por el Juzgado de Instrucción nº 2 de Alcañiz.