El dinosaurio descubierto en la localidad de Ariño es portada del último número de «Journal of Comparative Neurology», una revista estadounidense especializada en temas científicos. La especie Proa, denominada así por la forma de su cabeza, que recuerda a la parte delantera de un barco, y por haber sido hallados sus restos en una antigua mina de lignito de la localidad turolense.
Primo lejano del famoso ornitópodo Iguanodón, los fósiles del Proa de Ariño fueron analizados por un equipo internacional, liderado por investigadores de la Fundación Dinópolis y la Fundación Araid. El grupo de trabajo pudo analizar los restos con un escáner del hospital Obispo Polanco de Teruel.
La investigación concluyó que debido al tamaño del encéfalo del dinosaurio, esta especie pudo haber sido como sus parientes carnívoros.
Los fósiles de este animal solo se han encontrado hasta el momento en la antigua Mina Santa María de la localidad de Ariño. En ese espacio se encontraron 163 concentraciones de vertebrados y se recuperaron más de 11.000 huesos de animales que vivieron hace unos 110 millones de años.