El agua ha recuperado los límites de turbidez establecidos por la normativa
El suministro de agua de Alcañiz ha vuelto a ser potable este martes al mediodía después de que el lunes por la mañana se diera la alerta debido a la excesiva turbidez que dejó la crecida del fin de semana, que aún se mantiene en el Bajo Martín, donde recomiendan beber agua embotellada.
La excesiva turbidez que dejó la crecida de los ríos Guadalope y Martín en los pantamos de Calanda y Cueva Foradada, respectivamente, afectó a la calidad del agua de boca. En la capital bajoaragonesa este martes ya cumplía con los límites de turbidez establecidos en la normativa por lo que el Ayuntamiento emitió al mediodía un bando en el que anunciaba que ya era apta para el consumo humano. Por la mañana en los centros escolares los niños tuvieron que llevar agua embotellada ante la prohibición de beber en la fuente.
Embotellada en el Bajo Martín
Los parámetros siguen sin ser los óptimos en el Bajo Martín aunque también esperan que se normalicen en breve. Se sigue recomendando beber agua embotellada en Olite, Albalate, Urrea de Gaén Híjar, La Puebla, Samper, Jatiel y Castelnou. El único municipio del eje del río Martín en el que se puede consumir agua sin problemas y de alta calidad es en Ariño debido a que se abastecen tanto del pantano de Oliete como de un manantial de Alacón. Ahora están recurriendo al segundo para poder beber.
Además, en los municipios del Matarraña de Mazaleón, Lledó y Arens de Lledó, el agua también se declaró no potable este fin de semana pero, en este caso, se tomaron medidas alternativas con viajes de los Bomberos del Parque de Alcañiz para llenar los depósitos de agua apta para el consumo humano. El suministro se cortó a última hora del sábado y no se abrió hasta el domingo por la mañana gracias a la llegada de varios camiones de 12.000 litros de capacidad.