Caspe vendió una vez más todos los pases previstos para poder acceder a su tradicional Fantasmada, que regresó a la Ciudad del Compromiso en la noche de este domingo, víspera de Todos los Santos. Más de 1.500 personas se atrevieron a pasar miedo en un recorrido que completaron en grupos muy reducidos y que permitió retomar una cita que se ha convertido ya en tradición en la Ciudad del Compromiso. El pasado año 2020 no pudo desarrollarse, pero en el último día de este mes de octubre regresó en su duodécima edición gracias a la labor de un centenar de vecinos, que de forma voluntaria hicieron posible retomar la Fantasmada. A cargo de la organización, dos asociaciones claves en la vida sociocultural de la localidad: Histórica Vestimentum y la Casa Bosque, que hace unos años ya tomaron las riendas de un proyecto que cada vez va a más.
La cita se desarrolló en esta ocasión a los pies de la Colegiata de Caspe, un escenario impresionante que se quedó completamente a oscuras para la ocasión y que solo estuvo alumbrado por el fuego de las guías y las antorchas. Hubo varios pases, desde las 20.30 hasta casi la medianoche, y todos se llenaron tanto de vecinos de Caspe como de muchas personas que se trasladaron hasta la Ciudad del Compromiso desde otras localidades para disfrutar de la Fantasmada.
Las velas de unos misteriosos monjes dieron por iniciado un camino en la zona del jardín norte de la Colegiata, que transitó entre un bosque de espantapájaros y un circo de los horrores. Entre medias, escenas salidas de auténticas películas de terror, llenas de personajes que hicieron gritar a más de uno con sus cánticos e inquietantes mantras.
El balance de esta edición de la Fantasmada de Caspe es muy positivo, a pesar de que muchos eran los condicionantes que hacían peligrar la cita, entre ellos la reducción de aforos propia de la fase 2 modulada de alerta sanitaria, que dejaron de estar en vigor el sábado al pasar la ciudad a fase 1. «Estábamos todos un poquito nerviosos sobre todo lo que podía pasar. A esto hay que sumar la previsión del tiempo, pero finalmente nada, no llovió y además estábamos ya en fase 1 y la cosa cambia. ¿Qué más podemos pedir? La Fantasmada ha vuelto y lo ha hecho con muchas ganas», detalló Pedro Palacios, presidente de Histórica Vestimentum.
Tal y como explican, los vecinos de Caspe se volcaron para recuperar este evento, cuya organización conlleva mucho esfuerzo. «Fue un exitazo total, como siempre. Gracias a todos los que participaron y a los que han acudido. Este año el recorrido era cortito porque tampoco teníamos grandes expectativas pero como era un entorno tan bonito a la gente le ha gustado mucho», añadió Palacios. Los pases tuvieron un precio simbólico de tres euros, a fin de sufragar los gastos de organización, que incluyen los disfraces, el atrezzo y el uso de máquinas de luz o humo.
Durante la jornada del lunes todavía se continuaba retirando los elementos decorativos y pronto se hará una reunión para valorar cómo ha transcurrido esta duodécima edición y pensar ya en la siguiente.
Fantasmada de Caspe 2021. / B. Severino Fantasmada de Caspe 2021. / B. Severino Fantasmada de Caspe 2021. / B. Severino Fantasmada de Caspe 2021. / B. Severino Fantasmada de Caspe 2021. / B. Severino Fantasmada de Caspe 2021. / B. Severino Fantasmada de Caspe 2021. / B. Severino Fantasmada de Caspe 2021. / B. Severino
De FANTASMAS, los hay todo el año.
Y cada dia màs.