El histórico dirigente del Partido Aragonés cierra una etapa de 28 años dedicados a la política.
Fernando Cavero fue uno de los constituyentes de la comarca del Matarraña y ha dedicado 20 años a la alcaldía de Ráfales. Además ha sido diputado provincial y concejal en el Ayuntamiento de Alcañiz. Le entrevistamos:
¿Qué balance hace de su trayectoria política?
Hago un balance muy positivo. Yo no me puedo juzgar, serán los vecinos los que lo hagan. Evidentemente he cometido muchos errores en 20 años, es inevitable. Cuando las personas tomamos muchas decisiones es inevitable cometer algún error. Pero el balance es muy positivo y a los hechos me remito. El municipio en estos momentos tiene mucha infraestructura, está en muy buenas condiciones. El Ayuntamiento se queda con deuda cero y ello permitirá que el equipo que va a coger el relevo lo haga con una cierta comodidad para que puedan desarrollar las iniciativas que crean convenientes.
Ha vivido ese «descubrimiento» de Ráfales por los turistas
¿Creía usted que el Matarraña se convertiría en un destino de calidad?
No es que lo imaginásemos, es que se trabajó mucho por parte de todos los partidos políticos que estuvimos en el paso de la mancomunidad del Matarraña y la constitución de la institución comarcal. Una de las primeras cosas que se hicieron fue un consejo consultivo. En aquel momento los tres partidos que estábamos, el PAR, el PP y el PSOE tuvimos una visitón, hay que decir que bastante acertada a mi juicio, de que uno de los temas que debíamos incidir de manera fundamental era el turismo como alternativa importante a la agricultura y la ganadería. Pero decidimos que debía de ser un turismo de calidad. Con el presupuesto con el que contamos al inicio hicimos un estudio socioeconómico para ver de qué punto partíamos y especialmente un estudio profundo sobre el turismo que había en aquel entonces y sobre nuestras posibilidades. No había control en muchos casos en los alojamientos ni había reglamento. Pedimos a las casas rurales que ofreciesen una mínima calidad y muchas medidas acordes a lo que es el Matarraña. Una zona muy bonita, tranquila y atractiva para que vengan turistas, descansen y disfruten de nuestras gentes y paisajes.
¿Cómo vivió esos inicios de la comarca del Matarraña?
Lo vivimos de una forma muy inteligente todos. Cuando se inició la comarca los tres partidos acordamos dejar la política de partido al margen y trabajar con inteligencia. Nos vimos con que por primera vez teníamos una administración muy próxima al ciudadano del Matarraña y con unas herramientas desconocidas hasta ese momento. Sabíamos que conforme pasasen los años los Ayuntamientos, especialmente los más pequeños, tendríamos cada vez más carencias si no nos agrupábamos. Así que nos pusimos de acuerdo en buena parte de lo que debíamos de hacer, dejando a un lado lo partidista y nuestras ideologías para buscar el bien de nuestros municipios. Hasta que unas legislaturas después ya, lamentablemente, dejó de ser así, pero en un principio fue así. Yo creo que fue un acierto y en aquel momento fuimos una de las comarcas más avanzadas porque tomamos decisiones acertadas con consenso, claridad y rapidez. Estábamos todos de acuerdo y no perdíamos el tiempo en tirarnos piedras unos a otros.
Durante esta legislatura llegó a cuestionarse desde algunos ámbitos la función de las comarcas…
En aquel momento encontramos sintonía y receptividad. Estábamos como digo los tres partidos muy de acuerdo y por parte del Gobierno de Aragón tuvimos una respuesta importante. Nos ayudaron mucho para arrancar. No conozco ahora cómo está internamente la comarca, hace ya muchos años que no soy consejero. Pero sí que tengo muy claro que la comarcalización es fundamental. He sido alcalde de un municipio pequeño desde hace 20 años y tengo resuelto de forma extraordinaria el tema de los residuos, un servicio de urbanismo y una interminable lista de cosas que la hacen imprescindible. Sin las comarcas sería imposible prestar esos servicios.
¿Qué infraestructuras creen que hacen falta?
Principalmente las carreteras internas. Sin ir más lejos la que va de Ráfales a Valderrobres, pasando por el Portell es infernal. Es peor que muchas pistas. No se puede dejar una carretera abandonada y hoy en día la comunicación es fundamental. Por otro lado hay que seguir apoyando las iniciativas turísticas pero nunca permitir que se masifique la comarca.
¿Qué le desea a la nueva corporación?
Van a hacer un trabajo excelente porque han hecho un equipo muy bueno y no me cabe la menor duda de que el pueblo seguirá mejorando. Muy contento además por el respaldo que han obtenido en estas últimas elecciones.
¿Cómo ve actualmente el PAR?¿Como recuerda los tiempos en los que Jose Ángel Biel lideró la formación?
La filosofía del Partido Aragonés no ha variado. Somos un partido que siempre ha trabajado por su tierra, dentro de España, pero siempre hemos trabajado por Aragón. Eso se hizo con Biel y se hace ahora. Actualmente somos una fuerza que no hemos dejado de trabajar; otra cosa es que el mensaje llegue, pero la filosofía no ha cambiado. Desconozco si no estamos siendo capaces de transmitir correctamente nuestras ideas. Pero para nosotros Aragón es y siempre ha sido prioritario. Hemos sido decisivos para proyectos como Dinópolis, Motorland, el aeropuerto de Teruel, pero sobretodo con su gente.
¿Cree que tiene solución la «España vaciada»?
La tiene pero da la sensación de que no interesa proporcionarla. No ha habido voluntad desde Madrid para resolver un problema que se resolvería con una legislación favorable que permitiese unas condiciones de igualdad entre todos los ciudadanos, vivamos en el medio rural o en el medio urbano.
¿Cómo cree que puede resolverse el problema de la despoblación?
Estoy convencido de que este es un tema que si no se resuelve desde Madrid tiene muy mala solución, son ellos los que tienen la llave y si no lo resuelven es porque no quieren. La solución es sencilla: legislar. Si alguien quiere que aquí vengan empresas tiene que haber unas ventajas fiscales ¡No una ayuda! Si no unas ventajas fiscales permanentes. Se puede ayudar al autónomo con una tarifa plana, se puede establecer un impuesto de sociedades del 10% a las empresas que se establezcan aquí. Se puede rebajar la presión fiscal a las familias que tienen hijos estudiando en la universidad. Unos padres que tengan a sus hijos estudiando en cualquier Universidad, tienen una desventaja muy importante por vivir aquí. Conozco a mucha gente que se va de aquí porque sus hijos se marchan a estudiar. Al final si no resuelven los problemas que tenemos en la España vacía es porque no quieren, eso se resuelve con legislación.de una forma muy inteligente.
¿No va a volver a la política?
Tengo muy claro que no, entré por primera vez a un Ayuntamiento a los 35 años y me voy a los 63. Ha sido una etapa importante y muy larga y he cumplido mi objetivo. Ayudaré a todo el que me lo pida, si me lo piden, pero no volveré a la política.
¿Qué tiene Ráfales que enamora al visitante?
¡Qué te voy a decir yo! Tiene un entorno maravilloso, un conjunto histórico que es una maravilla y especialmente sus gentes, son personas receptivas y muy amables. Hay un sentimiento de comunidad y hermandad muy grande.
¿Cuáles son los mejores y peores momentos que ha vivido en la política?
Lo peor el tiempo que le he robado a mi familia. Lo digo con total sinceridad, sobre todo la época que fui diputado provincial. Esa es a las claras la parte más negativa. En cuanto a lo positivo me voy con la sensación del deber cumplido y satisfecho. Como he dicho, sin ninguna duda he cometido errores, pero he tomado muchísimas decisiones y ahí está el resultado.
¿Se ha sentido apoyado?
Sin ninguna duda, por ello reitero mi agradecimiento a toda mi familia. He de decir también que para mí Jose Ángel Biel ha sido la persona que más me ha ayudado en todos los aspectos. Ha sido un maestro que me ha enseñado lo que se debe de hacer y lo que no se debe de hacer en política. Nunca me ha pasado la mano por el hombro si no que me ha dicho las cosas claras. Hay otros políticos que juegan con los alcaldes. Jose Ángel siempre fue muy claro. Si se podía hacer algo lo decía y si no se podía hacer también. Ha sido una persona clave, no solo en el Matarraña si no en todo Aragón. Además es un enamorado de Ráfales, por ello no dudamos en nombrarlo alcalde honorífico vitalicio de la localidad en un acto al que invitamos a todos los que habían sido alcaldes, fue uno de los momentos más bonitos y emotivos que viví como alcalde de Ráfales.