El sector turístico vivió este domingo su gran momento del año con la celebración de la tercera edición de la Gala de Turismo del Bajo Aragón. Tras dos primeras ediciones celebradas en Alcañiz y Aguaviva, este año el lugar de encuentro fue Castelserás, municipio con más casas rurales de la comarca y con unos «recursos únicos para ofrecer». El regreso de la gala después de dos años sin poder celebrarse sirvió para reconocer el trabajo y esfuerzo que los empresarios del territorio ejercieron durante la pandemia para continuar promoviendo el turismo en la comarca. Todo ello con el fuego como protagonista en honor a la Monumental Hoguera de San Sebastián, símbolo de Castelserás.
Los grandes protagonistas de la ceremonia, que tuvo lugar en el antiguo Palacio de la Encomienda de la localidad, fueron cuatro. En primer lugar, el premio en la categoría Servicio Turísticos fue para El Escape Room ‘Salvar a las abejas’ de Mas de las Matas. Este servicio turístico llegó al pueblo hace cinco años, cuando la vecina Ana Pedro Zapater decidió crearlo uniendo su afición por los escape rooms y la de sus abuelos por la apicultura. «Es un juego entretenido para disfrutar en grupo y también tiene su toque rural a través de la apicultura», explica. Participar es un escape room es una opción cada vez más recurrida para pasar un buen rato, especialmente en las grandes ciudades, donde existe una mayor variedad. El objetivo de Ana cuando lo creó fue que visitar uno de ellos también pudiera ser una realidad en los pueblos.
Pese a notar una baja afluencia en los meses después del confinamiento, ahora el espacio recibe un gran número de visitas, un logro que consiguió que la joven pudiera volver a vivir y trabajar en su pueblo. «Estoy muy orgullosa de lo que se ha creado y este premio es una muestra de todo el esfuerzo. Me animé a crear el Escape Room gracias a mi madre, que hoy ya no está aquí, así que este premio va para ella», expresó Pedro.
Por su parte, el premio en la categoría Alojamiento recayó sobre la Casa Rural Fuentevieja de La Mata de los Olmos. Sus propietarios, María José Lahoz y Rafael Lahoz, la constituyeron como vivienda turística para poder volver al pueblo tras haber estudiado y trabajado fuera de él. «Habíamos comprado una casa que queríamos emplear especialmente para pasar los veranos. Se nos quedó muy grande y pensamos convertirla en una casa rural y hemos trabajado con gran esfuerzo para darla a conocer y conseguirlo», explicaron. Desde sus inicios hasta ahora mucho ha cambiado: antes el turista llegaba sin conocer la zona, y ahora vienen conociéndola a través de recomendaciones de otros que ya han estado. «Estamos situados en un punto estratégico de la comarca. Recibimos a gente de la zona, el resto de España e incluso fuera del país. Hemos llegado a tener huéspedes desde lugares como Indonesia«, aseguran con orgullo.
El premio es para ellos un empuje para seguir trabajando en un proyecto que combina la cercanía con el huésped y la gran oferta del territorio. Los que llegan a su casa buscan experiencias que combinen naturaleza, buena gastronomía y entretenimiento, y ambos intentan garantizar dichos requisitos en cada visita. «Son tantos años trabajando en esto que enseguida captamos lo que la cada perfil viene buscando. Y eso se nota porque son cada vez más los que repiten, especialmente después de la pandemia, cuando el nivel de trabajo se ha multiplicado», añaden.
En Restauración, otro de los pilares para el tejido empresarial de la comarca del Bajo Aragón, el restaurante Meseguer de Alcañiz fue el premiado esta edición. La marca Meseguer es toda una seña de identidad gastronómica de la capital bajoaragonesa. Cuatro generaciones familiares avalan a este restaurante, que ha sabido mantener la cocina tradicional con la vanguardia gastronómica como bandera de sus creaciones. Cuenta con una de las cartas más amplias de toda la provincia con 60 platos, además de la incorporación de nuevas recetas durante cada temporada. Unos datos que avalan el reconocimiento que se les fue entregado este domingo en Castelserás. «Formamos parte de la Asociación casi desde el principio, y que nos de un premio un compañero es algo que nos hace especial ilusión, sobre todo después de estos años tan difíciles», afirmó Fidel Meseguer.
El último galardón fue que se entregó durante la gala fue el del Embajador Turístico del Bajo Aragón 2022, que en esta edición recayó sobre la periodista María Lahoz. Natural de Valmuel, la comunicadora fue la encargada de recibir un «premio que no esperaba» en Castelserás, pueblo natal de su padre, y, por tanto, «un lugar que es como mi segunda casa». «Este es un reconocimiento que me hace muchísima ilusión porque tengo mis raíces aquí. Me dedico al periodismo, a la difusión de la información, y por sus tierras y sus gentes puede asegurar que no me equivoco nunca cuando recomiendo venir a disfrutar del Bajo Aragón», añadió emocionada. Lahoz tomó así el relevo al Embajador 2019, Luis Pitarque, reconocido fotógrafo de la comarca.
La tercera edición de esta gala estuvo marcada por momentos únicos. Además de una actuación musical, los asistentes también pudieron disfrutar de un espectáculo donde el fuego y las acrobacias fueron más que protagonistas. El número puso en valor el elemento como una seña de identidad del pueblo en el que se celebró la gala, donde su monumental hoguera atrae cada año a un gran número de turistas.
Tampoco faltaron los agradecimientos. Oscar Soriano, alcalde de Castelserás, fue el encargado de iniciar la cita felicitando a los empresarios turísticos del Bajo Aragón, «quienes, en un mundo en el que cada vez parece interesar lo que ocurre lejos, continúan poniendo el foco de atención en el territorio a través del turismo». El sentimiento fue recíproco. «Hemos comprobado que pese a tener perfiles diferentes, si nos mantenemos unidos somos más fuertes. Todos por igual: empresarios, representantes políticos y agentes sociales. Por eso, sigamos creciendo, unidos, mientras trabajamos por una comarca que está llena de oportunidades», aseguró Montse Thompson, presidenta de la Asociación Turismo del Bajo Aragón.