Endesa anuncia este miércoles a sus inversores las intenciones de cierre de la Central
La consejera de Economía, Industria y Empleo, Marta Gastón, ha hecho un llamamiento a los grupos políticos aragoneses para «unir fuerzas» y lanzar un mensaje unánime de rechazo a la decisión unilateral de Endesa de cerrar la central térmica de Andorra en 2020. Gastón ha mantenido un encuentro con los portavoces de los grupos en las Cortes de Aragón para trasladarles toda la información sobre el trabajo llevado a cabo por el Gobierno de Aragón tras recibir la noticia y pedirles un «compromiso unánime por y para el territorio» de cara a la celebración este miércoles del consejo de administración en el que, al parecer, la empresa va a trasladar su plan estratégico de inversiones.
Esta reunión llega tras el encuentro mantenido el pasado viernes entre Gobierno de Aragón y los agentes del territorio. La consejera de Economía, Industria y Empleo ha trasladado a los grupos políticos el contenido de la reunión y de la conversación mantenida durante la misma vía telefónica con la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera. Gastón ha expuesto «todas bazas puestas sobre la mesa», definidas en dos posibles vías. La primera, explorar todas las posibilidades para alargar «un tiempo razonable» la vida de la central térmica que permita buscar alternativas y lograr una transición realmente justa, tal y como se ha comprometido la propia ministra. Y la segunda, la exigencia a Endesa, cuando el Ministerio de Transición Ecológica reciba la solicitud de cierre, de «un plan de acompañamiento que trate de paliar el hueco que deja la central» y que complemente al plan de reindustrialización «urgente» que debe promoverse desde Los Gobierno central y autonómica, implicando a las administraciones locales.
La consejera de Economía, Industria y Empleo ha incidido una vez más en que «no sirve exclusivamente la inversión en energías renovables, que no deja de aportar nuevos beneficios a Endesa». En su opinión, el plan de acompañamiento debe contener más proyectos que respondan al compromiso del territorio con la empresa y ha pedido una vez más a Endesa «reciprocidad y responsabilidad social».
Retrasar el cierre
Entre las vías que se están explorando por parte del Ministerio para retrasar el cierre, figura la posibilidad de fijar 1.500 horas de trabajo en la central. Esta opción «no conllevaría la imposición marcada por la directiva europea de acometer inversiones por parte de Endesa», ha afirmado Gastón. Otra alternativa planteada por expertos es la eliminación del «céntimo verde», tal y como se lleva a cabo con el gas. «Estas propuestas trasladadas a la empresa pretenden que esa decisión, que aún no se nos ha comunicado de manera oficial, pueda modificarse», ha explicado la consejera.
«Si en casi 30 años no se han conseguido alternativas 100% a la economía dependiente de la central térmica, es dificilísimo lograrlo de aquí al 2020», ha subrayado Gastón en relación a la necesidad de un mayor periodo de tiempo para lograr una transición justa.
La portavoz del PP, Mar Vaquero, ha hecho hincapié en que cualquier mensaje que se quiera lanzar ha de plantear la posibilidad de alargar la vida de la central e incluir la voluntad de llevar a cabo un proceso de transición energética «ordenado» ante un cierre que ha acelerado la empresa por el modelo energético del Gobierno central, ligado a la «descarbonización».
Maru Díaz, de Podemos, ha tachado de «vergonzoso» que Endesa pretenda irse del territorio sin invertir para que haya una transición justa, pero ve complicado un texto unánime si no se señala a la empresa «como corresponde, no con medias tintas» y si no se admiten las responsabilidades, porque los sucesivos gobiernos no han previsto «un plan B» para la zona.
Arturo Aliaga, del PAR, ha asegurado que su partido no romperá la unanimidad, pero que la «reunión de reuniones» que se tiene que producir, y no ha sido así, es la los gobiernos de España y Aragón con Endesa para que la térmica pueda funcionar unos años más, con un marco regulatorio ordenado.
Susana Gaspar, de Ciudadanos, también ha defendido una transición justa y viable y ha tendido la mano para convertir en realidad un plan de reindustrialización, pero ha incidido en que su grupo apoyará un texto unánime siempre que aluda a la mala gestión de los gobiernos respecto a la central y a las necesarias alternativas económicas.
Javier Sada, del PSOE, también ha reclamado a los grupos que abandonen posiciones partidistas en pos de la unidad ante un asunto de tal importancia, porque el objetivo es mandar «un mensaje directo a Endesa», para que paralice el cierre y se implique en el desarrollo de la comarca, y para mostrar que todos están «tirando del mismo carro».
Gregorio Briz, de CHA, ha coincido en pedir a los grupos que dejen de lado los réditos electorales, porque lo que no se puede permitir a Endesa es que amenace a los gobiernos con cierres y «codicie solamente el beneficio», sin responsabilidad corporativa social.
Patricia Luquin, de IU, ha reivindicado presionar a Endesa, una empresa privatizada que ha decidido cerrar de forma unilateral y que lo único que mira son los beneficios, y ha remarcado que un texto unánime es importante, pero más aún la búsqueda de una alternativa para las cuencas mineras.
Reunión de inversores
Este miércoles, Endesa celebra una reunión de inversores en la que presentará su plan industrial para 2019. En su programa no se contemplan las inversiones en la Central de Andorra. Será en esta jornada en la que la eléctrica informe de forma oficial que la infraestructura cerrará, como tarde, en junio de 2020.