Más de dos años después del inicio del desembalse para prospecciones, siguen sin repararse los daños
El embalse de La Estanca de Alcañiz sigue a la espera de una obra importante para evitar las filtraciones que sufre desde hace como mínimo ocho años, con los problemas que ello conlleva de pérdida de agua además de presiones sobre la presa. Este verano la CHE aseguró a este medio que el proyecto de reparación ya estaba en redacción y que las obras iban a estar adjudicadas a finales de 2017. Sin embargo, continúa el retraso porque, por el momento, ni tan siquiera han salido a concurso.
Estas filtraciones, que ya se conocían, se han constatado con los diversos estudios que la CHE ha realizado en los últimos meses debido también a la antigüedad del embalse, que data de 1930. Por tanto, ahora se debe acometer una obra para terminar con los problemas aunque desde la Confederación evitan dar más detalles de los trabajos que se llevarán a cabo. Las obras tendrán un coste aproximado de 3,5 millones de euros y consistirán, principalmente, en inyectar hormigón armado a las paredes.
Fue en octubre de 2015 cuando se inició inicia la maniobra de desembalse de La Estanca para reducir el agua embalsada hasta los dos hectómetros cúbicos y proceder así a auscultar el paramento de la presa aguas arriba, que normalmente queda cubierto por las aguas, y comprobar su estado general, para definir posibles acciones de reparación. Se realizó de forma progresiva y a un ritmo lento para evitar afecciones en las acequias situadas aguas
La actuación se integró dentro de los trabajos de mantenimiento y conservación general de infraestructuras hidráulicas de la CHE y se coordinó con las comunidades de regantes de la zona para hacer coincidir el desembalse con el fin de la campaña de riego que se produjo en días anteriores.
Concretamente, con la maniobra se comprobaron las presiones sobre los cimientos y las filtraciones provocadas por el paso del tiempo en esta infraestructura. Así, tras la auscultación del paramento se ejecutaron los trabajos necesarios para verificar la pantalla de impermeabilización y los drenes de la presa, con el objetivo de reducir filtraciones y presiones.
La Estanca de Alcañiz es un embalse en derivación del río Guadalope, nutrido por un canal de alimentación que nace de un azud situado en el río, que raramente presenta un volumen de llenado por debajo de los 6 hm3.
Llegados a este punto debería ser el Ayuntamiento en pleno el que instase a la CHE a que ejecute de forma urgente la reparación.
Aquí no valen partidos lo único que cuenta es la Ciudad.
A ver si por una vez se aprueba por unanimidad algo.