El contrato estipula sanciones si no se paga en tiempo y forma a las subcontratas
2.000 euros al día. Esta es la penalización que deberá pagar la UTE del Hospital si se retrasa en el plazo de ejecución total. Es decir, si termina y entrega la obra más tarde de los 52 meses que tiene previsto por contrato y que empezaron a correr cuando se firmó el acta de inicio de los trabajos, a finales de octubre. Por tanto, será en febrero de 2022 cuando se cumpla el plazo aunque desde DGA reiteran que las obras terminarán en 2021.
Así lo estipula el contrato firmado por el departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón y la UTE OHL-Dragados firmado el 27 de julio de 2017 y que ahora se ha hecho público por petición de la diputada del PAR en las Cortes de Aragón y concejal en el Ayuntamiento alcañizano, Berta Zapater. En este documento, muy técnico, a parte de la citada penalización por el incumplimiento en la ejecución del contrato también se estipula una sanción de 500 euros al día por la omisión del mantenimiento preventivo, correctivo y técnico. Desde la prevención y extinción de incendios a la climatización, calefacción, gas natural, puertas automáticas, placas solares fotovoltaicas y aparatos de elevación, entre otros. En su oferta la UTE se comprometió a incrementar el periodo de garantía en dos años sobre los tres de plazo estipulados.
Las subcontratas deben ser «aptas»
Otra de las cuestiones que estipula el contrato es que la UTE debe comunicar de forma anticipada y por escrito todas las subcontrataciones que realice junto con documentación que justifique su «aptitud» para realizar las obras así como una declaración responsable de que la empresa no tiene prohibido ser contratada por la administración. En este sentido, la UTE también podrá ser penalizada si incumple los periodos de pago acordados con la subcontrata. La sanción, que no viene especificada en el documento, se descontaría de la certificación. Tal y como ya adelantó La COMARCA, la OHL-Dragados tuvo problemas para encontrar subcontratas que quieran trabajar en la construcción del nuevo Hospital debido a que ofrece pagar en 240 días (8 meses) y no en el plazo máximo de sesenta días que establece la ley y con precios bajos. Utiliza el método del «confirming», una herramienta que permite dilatar el pago debido a que la subcontrata puede percibir el dinero con anterioridad a través de un banco pagando intereses. Un método que, aunque «no es lo habitual» en el territorio, sí lo empleen grandes empresas estatales como puede ser el caso de OHL y Dragados.
Ya se vierte en un vertedero
En cuanto a los trabajos del Hospital, continúa adelante la nivelación de la parcela y ya se está retirando tierra desde la semana pasada a una parcela cercana a la carretera de Caspe. Trabajan seis vehículos y tres retroexcavadoras. Los camiones que transportar los escombros salen de la ladera de Cantagallos por la Vía Verde, ahora mucho más transitada. Concretamente, se extrae tierra que pertenece a una capa superficial del suelo y se puede reutilizar después en la obra. Por ello se deposita en un punto de un solar cercano acondicionado por la UTE según fuentes del salud. En este sentido, la diputada Zapater también registró una pregunta en las Cortes para conocer si el vertedero que empleará la UTE, y del que se desconoce su ubicación, está autorizado. De hecho, en el precio total del Hospital, 57,4 millones, un millón es el precio que se calcula que costaría verter los escombros a un vertedero autorizado.
La nivelación y extracción de escombros debe estar lista a finales del próximo mes. Según el plan de trabajo anunciado por el presidente Javier Lambán, la cimentación se iniciará el 31 de mayo y casi un mes después, el 26 de junio, se comenzará a levantar la estructura del edificio. No obstante, antes de comenzar la cimentación la UTE debe pagar casi dos millones al Ayuntamiento de Alcañiz entre tasas y licencia de obras de los 9,4 que cobrará en 2018 de DGA.