Alcañiz registra 39 accidentes de tráfico producidos por jabalíes desde el verano
La masiva presencia de jabalíes no sólo supone un problema para los agricultores sino que también provoca un peligro para la seguridad vial. Los accidentes de tráfico se suceden en el medio rural y sólo en Alcañiz se han registrado desde el verano 39 choques con estas especies, a los que habría que sumarse los que no se comunican a la Guardia Civil. Se trata de un número muy alto de accidentes que se agravan teniendo en cuenta que la mayoría se producen en las carreteras nacionales N-232 (hacia Zaragoza) y N-211(hacia Calanda), en las que se conduce a mayor velocidad que en otro tipo de vías. En el mejor de los casos, son los vehículos los únicos afectados pero también pueden causar daños personales.
Para aclarar la responsabilidad de estos siniestros se atiende a la Ley de Tráfico y a la de Caza de Aragón. Pese a que hay responsabilidad institucional, los expertos recomiendan incluir en los seguros de los vehículos las cláusulas que contemplan los accidentes cinegéticos.
«La ley responsabiliza al conductor. Aunque también establece que la DGA puede hacerse cargo del siniestro, esta acepción es un cajón de sastre para la que se tienen que cumplir unas condiciones muy rigurosas y concretas», apunta la abogada, antropóloga y máster en derecho cinegético, Esmeralda Pastor.
La letrada explica alguno de esos requisitos: que el accidente no haya sido culpa del conductor; que haya ocurrido en un perímetro máximo de un kilómetro de un coto de caza; que haya tenido lugar la acción de cazar en un espacio de tiempo de 12 horas anteriores al accidente; y que el conductor acredite toda la documentación en regla del vehículo. «Si llevas la ITV pasada de un día, el Gobierno de Aragón ya no te cubre el sinistro», recalca Pastor, que especifica que la reclamación se ha de realizar con la factura del arreglo del vehículo abonada previamente.
En el caso de prosperar, el Gobierno de Aragón analizaría la situación del coto y de la propia carretera para comprobar que ambos cumplen con las obligaciones de señalización, vallado o registros de actividad, entre otros.
Indemnizaciones en el campo
Del mismo modo que se recomiendan seguros particulares para accidentes cinegéticos a los conductores, se aconsejan para los agricultores. La Ley de Caza no contempla responsables en las afecciones que las especies cinegéticas pueden producir en los cultivos.
«Demostrar que un animal de caza mayor que causa unos daños pertenece a un coto es imposible, ya que se van moviendo. Así que sólo queda incrementar la caza y contratar seguros particulares», comenta la abogada.