Los vecinos solicitarán a DGA y al Inaga que opten por soterrar la línea eléctrica y así se evite su paso por el valle de Valloré
El anuncio de la construcción de una nueva línea eléctrica de media tensión por Montoro de Mezquita ha causado gran malestar en esta pequeña localidad del Maestrazgo. Por este motivo, la Asociación para el Desarrollo de Montoro de Mezquita presentará alegaciones contra su construcción con el objetivo de evitar que esta nueva red eléctrica termine con el gran valor patrimonial del valle de Valloré.
La línea aérea de media tensión, con una potencia de 20kv, uniría la localidad con Aliaga y tendría una longitud de más de siete kilómetros. De esta manera, el valle y los estrechos de Valloré se interpondrían en su camino sin mayor problema, una situación con la que no están nada de acuerdo los vecinos de Montoro de Mezquita. «Es como si por los Órganos de Montoro o el Parrizal de Beceite se decidiera poner una línea por encima», lamentó José Manuel Salesa, secretario de la Asociación para el Desarrollo de Montoro.
Pese a que la noticia de la construcción de esta línea eléctrica se dio a conocer el 15 de febrero en el Boletín Oficial de Aragón, Endesa Distribución Eléctrica ya andaba detrás de este proyecto desde hace tres años. El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) solicitó a la empresa un estudio de impacto ambiental para realizar la obra, un documento que registraba tres posibles trazados para esta nueva red eléctrica. De los tres, la empresa eligió el peor para Montoro de Mezquita. «El que han elegido es el que menos impacto ambiental provoca en la zona, pero aún así es aberrante para nosotros», indicó Salesa.
Desde la Asociación para el Desarrollo de Montoro de Mezquita señalan que ninguno de los tres recorridos les convence y que la mejor opción sería el soterramiento de la línea. «Se podría hacer perfectamente. Es evidente que sería mucho más caro, pero debemos de plantearnos si todo vale. Son sitios que tienen un valor enorme y son cosas que debemos preservar», destacó José Manuel Salesa. En la misma línea se situó Carmen Olague, vecina del pueblo y propietaria de dos casas rurales en Montoro. «Ahora que tenemos un atractivo maravilloso en el pueblo y que nos visita mucha gente, nos lo quieren quitar. No lo podemos entender».
Curiosamente, el origen de esta asociación también tiene relación con la electricidad y con Endesa. Entonces, era el año 1996, un grupo de vecinos se organizaron para exigir que la línea eléctrica llegara hasta Montoro de Mezquita. Ahora, cosas de la vida, no acaban de entender que la misma empresa les quiera poner una nueva línea eléctrica gratis. «Nos extraña que entonces nos pusieran todos los problemas del mundo para traer la luz al pueblo y que ahora nos quieran regalar una línea redundante». Con todo, la nueva red eléctrica, pese a no ser imprescindible para la localidad, serviría para que los vecinos tuvieran luz en caso de fallo o rotura en la línea habitual.
Búsqueda de apoyos
Hasta el próximo 15 de marzo la Asociación para el Desarrollo de Mezquita tiene tiempo para presentar alegaciones ante el Departamento de Industria de Aragón y el Inaga. Además, durante este tiempo van a intentar recabar apoyos en el territorio para evitar que Endesa acabe construyendo la nueva línea eléctrica en la zona. «Hemos iniciado contactos con ayuntamientos cercanos, con la Comarca, asociaciones empresariales y también con el Parque Cultural del Maestrazgo», explicó José Manuel Salsea.
El objetivo de la asociación es conseguir que estos interlocutores acaben por posicionarse respecto a esta problemática. «Entendemos que lo tienen que hacer. No es solo una cuestión de los estrechos de Valloré, sino de un modelo de desarrollo. La única salida que tienen estos pueblos, en este momento, está siendo el turismo. Si los llenamos de canteras, parques eólicos y líneas de media tensión, habrá que plantearse el coste que tendrán en el futuro», destacó el secretario de la asociación.
Miguel López dice
Todo nuestro apoyo a la asociación por el desarrollo de Montoro. El gobierno de Aragón no puede ni debe permitir ese abuso paisajístico y medioambiental por parte de ENDESA.