Mª José Carrasco, ganadora de la 'Lámpara Minera', máximo galardón de flamenco del país, cautivó al público andorrano
El Pozo San Juan fue testigo el pasado sábado del concierto de María José Carrasco, la sevillana ganadora de la Lámpara Minera 2018, máximo galardón del concurso de flamenco más importante de España celebrado desde hace 58 años en La Unión (Murcia). Con la luz del atardecer, su cante acarició y congeló a vecinos, visitantes y parte de los mineros andaluces afincados en la villa que disfrutaron del recital enmarcado en el ciclo cultural 'La Mina en Solfa' organizado por la Comarca Andorra-Sierra de Arcos durante doce años.
-¿Cómo ha sido cantar una 'minera' en pleno corazón de una mina?
Impresionante. El Pozo de San Juan es un entorno precioso. Cantar la canción con la que gané la 'Lámpara' en este escenario dedicada a todos los trabajadores de esta tierra me ha hecho vivir un momento mágico.
-«El que trabaja en la mina conoce el mundo por dentro y lo demás lo adivina». Son los versos que has dedicado a los mineros voluntarios de Andorra
Así es. Es un trabajo que merecen todos mis respetos del mundo. Cuando pienso en todas las penurias y fatigas que pasaban…¡Eso no está pagado!
-¿Qué tiene de especial este palo del flamenco?
Es una vertiente muy complicada aunque aparentemente puede parecer sencillo. Me he tenido que preparar mucho, cada matiz de cada estrofa. Le caracteriza la dureza y la tragedia ya surgió bajo tierra, lo cantaban los mineros a finales del siglo XX para desahogarse de sus largas jornadas laborales.
El trabajo del minero merece todos mis respetos. Cuando pienso en todas las penurias y fatigas que pasaban…¡No está pagado!
-¿Cómo empatizas con esa emoción tan profunda y característica?
Cuando canto, cierro los ojos y me imagino dentro de una minera a mi manera. Para sentir y que ellos me sientan de la misma manera que yo me siento.
-Pero no todo ha sido duro. ¡Has acabado con bulería!
Depende de la emoción del momento. Mi cante es de compás pero, si tengo pena me encuentro cómoda cantando «levante»; un canto mucho más trágico pero, cuando una tiene alegría como ahora, me arrancas por «bulerías», «tango» o «Alegrías de Cádiz».
-Ahora vives como dices un momento de alegría con la «Lámpara Minera» en casa
Si, ha sido un año muy duro. Gracias al apoyo de mi familia, quienes me han ayudado a perseguir mi sueño decidí estudiar, prepararme e ir a por el premio. Ha merecido la pena tener un galardón tan preciado en el mundo del flamenco.
-Y tan preciado, precisamente ha catapultado a la fama a artistas como Miguel Poveda, Vicente Amigo o Israel Galván. ¿Cómo ves tu futuro?
Por el momento no me pongo ninguna meta. Tan solo vivir el día a día, dar lo mejor de mí es mi máxima meta. Y bueno, si luego vienen los éxitos, pues mejor que mejor, pero por el momento voy poco a poco.
Mi única meta es dar lo mejor de mí cada día
El viernes en Algeciras, hoy en Andorra ¿cómo estás viviendo el mes de agosto?
Me siento como la Pantoja (risas). ¡No sé las entrevistas que he dado!, pero estoy encantada, intento estar para todos porque este es el momento de entregarme en cuerpo y alma y estoy feliz, contenta como una niña chica.
-El Pastor de Andorra, es un referente para la jota, llevó por todo el mundo nuestra música tradicional, ¿lo conoce?
Sí que conozco la jota. He escuchado mucha, pero no conocía al Pastor de Andorra. ¡Los buscaré sin duda!
Enhorabuena por la entrevista a esta excelente cantaora!!