Más de 70 actores y actrices han retomado este año los ensayos de las farsas y del acto central de la conmemoración del Compromiso. En esta ocasión, han contado con menos tiempo del que disponían en ediciones anteriores, debido a la reciente decisión del Ayuntamiento de que se reestablecía la celebración. No obstante, Pablo Lagartos, el director artístico de las representaciones, asegura que los ensayos y preparativos se han desarrollado «según lo previsto». Cada tarde se han estado reuniendo los diferentes grupos de ensayo en el Teatro Goya para retomar los papeles de años anteriores.
En esta edición no tocaba añadir una nueva farsa -ya que se renuevan cada dos años y el año pasado se canceló la conmemoración-. Sin embargo, sí que han sido necesarios algunos cambios en el guión «dadas las exigencias de la pandemia». De esta manera, se han transformado algunas escenas en las que los actores se movían entre el público. Y también se han unido todas las farsas en una, para recrearlas en el escenario de la Plaza del Compromiso y así poder controlar el aforo.
Lagartos asegura que la pandemia también ha influido en la forma de llevar a cabo los ensayos -como es la separación en pequeños grupos- y las representaciones. «Es más difícil que los actores trabajen con mascarilla, ya que evidentemente pierden expresividad», reconoce el director artístico del Compromiso. Además, añade que también ha habido algún problema o contratiempo durante los ensayos al tener a algunas actrices confinadas en alguna ocasión. A pesar de todo esto, Pablo Lagartos reconoce que «una de las cosas maravillosas que tiene el teatro es el sentimiento de grupo, y este año esa sensación está muy presente entre todos»
Acto principal
La representación del acto principal «El Compromiso de Caspe: La elección de un Rey» será el primer acto que se realizará sin la obligatoriedad de llevar mascarilla. Esta flexibilidad en las medidas sanitarias permitirá una mayor expresividad en las interpretaciones de los participantes en las obras y favorecerá a la sonorización, según explican los encargados de la organización.
Este acto consiste en una representación teatral de la elección del sucesor al trono de Aragón. En ella aparecen los Compromisarios que eligieron al nuevo rey, los pretendientes al Trono y algunos personajes más. Jesús Cirac es uno de los protagonistas del acto central. Concretamente él interpreta al Arzobispo de Tarragona, Pere Sagarriga. Este personaje histórico es la máxima autoridad eclesiástica del momento que se representa, es decir, principios del s. XV. «Él era un defensor del candidato que no salió, Jaime de Urgel, pero también debía su presencia en el compromiso al Papa», explica Cirac sobre su personaje. Este actor caspolino ha actuado en numerosas ediciones de esta celebración, y ha interpretado dos papeles distintos del acto central durante su trayectoria.
«Llevamos varios años trabajando en la divulgación un poco más científica para que la obra no se base solo en cuatro hechos de aquel momento», expone Cirac. Respecto a la vestimenta con la que representan a los personajes medievales, Jesús Cirac enumera hasta cinco capas que se coloca para dar vida al Pere Sagarriga. Además, el color que caracteriza a este personaje es el morado, sobre todo en las capas superiores, ya que era el pigmento destinado para el Clero.
Obras cercanas
«Es una obra de teatro amateur, pero todo lo que la rodea es profesional y hay mucha gente con gran experiencia que está trabajando con nosotros», expone el director artístico Lagartos. Además, añade que la diferencia básica que encuentra entre los actores amateur y los de profesión es el tiempo que pueden dedicarle al teatro. No obstante, en las representaciones del Compromiso «contamos con actores y actrices con más de 25 años de experiencia haciendo teatro, algo que pocos pueden decir», reconoce Lagartos.
En el acto principal participa alrededor de una veintena de actores y actrices. Pero también forman parte de esta representación de cerca de 100 personas entre figurantes, el Coro de Caspe, los Heráldicos, o la asociación de Héroes Legendarios. Todos ellos hacen posible la obra. Este año cuenta con un aditivo: la actuación del Coro de Caspe, con música del siglo XV en directo. Otra de las novedades relacionadas con este acto es la proyección de un «vídeo-mapping» en la fachada de la Colegiata.
Farsas humorísticas
Además del acto principal, esta celebración cuenta con cuatro farsas medievales que se interpretarán durante la noche de mañana. Estas pequeñas obras tienen que ver con lo que estaba pasando en Caspe mientras se celebraba el Compromiso. Una de ellas representa a parte de la servidumbre de los Compromisarios, quienes se trasladaron hasta esta localidad con motivo de la elección del nuevo rey. Otra de las farsas habla de cómo se sentía el pueblo de Caspe durante aquellos días en los que las calles del municipio aumentaron considerablemente la población, como consecuencia de todos los que acompañaron a los Compromisarios y a los pretendientes.
La tercera de ellas trata sobre la producción de vidrio, en la que Caspe era el centro productivo de Aragón. Y la última farsa está relacionada con las familias judías y conversas, que tenían el control de las fábricas de vidrio. Marina Benedí es una vecina caspolina que participa en una de las farsas. Esta actriz interpreta el papel de Judith, una mujer judía empresaria. «Ella es una persona fuerte y autoritaria, porque quiere que su empresa vaya muy bien. Pero lo principal de la farsa es que es muy divertida», reconoce Benedí.
Además, respecto a los ensayos de este año, explica que «han ido muy bien y tenemos muchas ganas de actuar». Después del parón por la pandemia y teniendo en cuenta todos los años en los que ha sido parte de esta celebración, insiste en que echaba en falta volver a los escenarios, igual que el resto de sus compañeros y compañeras. Benedí confiesa que «esto nos da vida, tanto a nosotros los actores, como al pueblo».
Esta actriz caspolina lleva actuando en la conmemoración del Compromiso desde la segunda edición. Benedí explica, desde su experiencia, que siente «mucha satisfacción y mucho orgullo» de poder actuar delante de sus vecinos y la «gente que tanto nos quiere y tanto nos espera cada año»
Una actriz de 68 años
La actriz más veterana de todo el conjunto de representaciones que tendrán lugar en Caspe este fin de semana es Nieves Maza. Esta actriz caspolina lleva actuando en las farsas desde la primera edición en la que Caspe se vistió del siglo XV, aunque reconoce que casi siempre ha hecho papales secundarios.
A sus casi 86 años, Nieves Maza está «encantada» con su labor en las farsas. «Tengo muchos vestidos y complementos medievales», reconoce coqueta la actriz. Además, confiesa que durante los días que no le toca actuar también se viste con ropajes medievales para salir a las calles de Caspe e integrarse en el ambiente del siglo XV.
Ella interpreta a Genara, una criada cuyo papel es «calmar a la dueña por los nervios de que una de sus hijas se case con un varón hijo de una enemiga», cuenta Maza, con los ojos repletos de ilusión.
Respecto a los ensayos de las farsas, asegura que está muy contenta por poder retomar el teatro, pero también explica que ha encontrado una «pequeña dificultad por el uso de la mascarilla», sobre todo en relación con la interpretación de las compañeras.
Maza tiene claro cómo se vestirá durante esos días y afirma que intentará que no le pongan muchas capas. «Tengo un traje un poco más liviano y me pondré ese, porque hace mucha calor, aunque si este año las farsas son por la noche, estaremos mejor», explica la actriz más veterana.