«Alcosax» culminó su XI edición con un concierto de su Orquesta de Saxofón
La voz de los más de treinta saxofones que participaron en la última edición de 'Alcosax' se unieron el pasado sábado en la plaza Bienvenido Argensola para ofrecer una 'Jam session' a todos los asistentes.
Este tipo de actuaciones, que surgieron en los años veinte en Nueva Orleans, mismo lugar en el que nació el jazz, se reducen a una reunión de personas que no tienen más pretensión que compartir su pasión disfrutando de buena música. Y es ahí donde residió la magia de esta sesión de improvisación en la que los jóvenes músicos demostraron la compenetración que tenían gracias, en parte, a las largas sesiones formativas a las que asistieron diariamente durante la pasada semana. «Cada día, uno de los profesores enseñaba diferentes técnicas. Son días exigentes no queda poco tiempo libre», explicó Javier Alloza, alcorisano y coordinador de 'Alcosax'.
Unidos por el lenguaje musical, disfrutaron sobre el escenario y regalaron esa emoción al público con improvisaciones de jazz en un recital que traspasó las fronteras del espectáculo ya que la «jam» consistió en compartir todos los valores que durante siete días alumnos venidos de diferentes puntos geográficos compartieron con ocho entregados profesores.
El domingo, las obras de Debussy y Bach interpretadas por la Orquesta de Saxofones Alcosax fueron las melodías finales que cerraron de manera definitiva la décimo primera edición del Festival desde la Iglesia de San Sebastián, el mismo lugar que fue testigo de conciertos diarios desde el pasado martes 21 de agosto.
Con el concierto de clausura, todos los enamorados del saxofón que han encontrado en Alcorisa cada segunda quincena de agosto su Edén particular, regresan ya a sus ciudades de origen con la ilusión de regresar el próximo año a fundir sus instrumentos en el Bajo Aragón.