Alcañiz y Andorra han sacado sus tambores a la calle como es tradición este Miércoles de Ceniza para dar la bienvenida a la Cuaresma como mejor saben, con un sonido que es Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO. Este día marca el inicio de la Cuaresma y abre la veda para tocar el tambor libremente. También marca el inicio de los ensayos de las bandas de las cofradías y hermandades.
En Alcañiz la cita ha sido sobre las 20.15 en la plaza España y ha contado con más de 200 personas, entre ellas, numerosos niños, principalmente los alumnos de la Escuela de los Amigos del Tambor. De los ensayos se han trasladado a la plaza para conocer desde bien pequeños las tradiciones alcañizanas junto a los mayores. Este acto reúne cada vez a más personas y además la climatología ha acompañado. «Cada año la participación es mayor», ha destacado Eduardo Bardavío, presidente de los Amigos del Tambor.

En Andorra la concentración de tambores y bombos es una tradición que se ha recuperado y que poco a poco va ganando adeptos. La cita ha sido en la plaza de la Iglesia al finalizar la misa y ha reunido a los locales. En total, han participado alrededor de 200 personas. En el caso de la villa minera, la Escuela del Tambor comenzará la próxima semana con dos grupos y a la siguiente con los más pequeños, los de Infantil. «Este año nos hemos movido con charlas en los colegios y parece que los niños se están animando. Creo que llegaremos a los 100 o 120 alumnos», explica Aitor Pes, presidente de la Cofradía del Cristo de los Tambores.
