El Monasterio de Nuestra Señora de El Olivar es un lugar único por varios motivos. Ubicado en el término municipal de Estercuel, funciona como Hospedería en la que se refugian muchas personas durante todo el año para encontrar paz, sosiego y un respiro del mundo. Es también el encargado de preservar la mayor colección de cuadros de la artista Nati Cañada. Pero además, cuenta con el certificado Monasterio Starlight, que le entregó la prestigiosa Fundación que acredita los cielos más puros para la observación de estrellas y astros.
Precisamente estas fechas -a la espera de la llegada de las famosas Perseidas– son especiales para los amantes del cielo nocturno. Desde el Monasterio no han querido dejar pasar esta ocasión y han preparado dos actividades, que se unen a las muchas otras que realizan para poner el valor la observación y el poder de sumergirse de vez en cuando en un baño de estrellas.
El encuentro principal tendrá lugar el próximo miércoles, momento en el que se prevé el pico de intensidad de las Perseidas, pero este mismo sábado han preparado una actividad que servirá de antesala. La plaza del Monasterio será el escenario de esta observación del cielo, en el que ahora mismo están muy presentes Júpiter y Saturno. La actividad está acotada a 40 personas para respetar las distancias de seguridad y ya no queda ni una plaza libre. Principalmente se trata de personas de localidades vecinas interesadas en la observación y en conocer más sobre el cielo gracias a la labor del guía Starlight del Monasterio, fray Fernando Ruiz.
No obstante el evento principal se celebra en la noche del próximo miércoles 12 de agosto al jueves. En una actividad que abarcará desde las 10 de la noche hasta las dos de la madrugada, el campo de fútbol del Monasterio será testigo de otra observación guiada en la que se hablará de leyendas relacionadas con el cielo, las constelaciones, la galaxia y también, por supuesto, de fotografía nocturna, una de las especialidades del Monasterio. Música en directo y la posibilidad de hacerte una foto con el fondo incomparable de este cielo completarán la actividad.
Un total de 150 personas como máximo podrán disfrutar de la cita, que contará con todas las medidas de seguridad que exige la situación. La amplitud del espacio hace posible dicho número de asistentes, que estarán ubicados en «islas» de cuatro metros de ancho por cuatro de largo, organizados por núcleos de convivencia. Para poder asistir, eso sí, habrá que inscribirse poniéndose en contacto con el Monasterio de El Olivar y facilitando ciertos datos. En cuanto al precio de la actividad, funciona con «entrada inversa», es decir, los asistentes aportarán a la salida del evento la cantidad que cada uno considere en base a su experiencia en este enclave único.