El PAR celebrará su congreso el 23 y 24 de octubre y Aliaga optará si le acompaña la salud

Después de meses de críticas internas e incluso una demanda judicial para forzar una fecha para el XV Congreso del PAR, la comisión ejecutiva del partido aprobó finalmente ayer por la tarde que se celebre el 23 y 24 de octubre, pero sigue siendo una incógnita si habrá una candidatura alternativa a la del actual presidente, Arturo Aliaga. El 71% de la dirección, 17 de los 24 miembros que acudieron a la cita en el hotel Zentro, respaldó la decisión, mientras otros cuatro votaron en contra y tres se abstuvieron.

El también vicepresidente aragonés optará si su salud se lo permite, aunque reiteró que la decisión la tomará cuando acabe el verano pese a que, bromeó, su mujer y sus hijos lo vayan «a matar». «Si estoy bien, no pienso tirar la toalla», sentenció.

Y por si hubiera alguna duda de su futuro político, dio por hecho que si revalida como líder aragonesista optará también a repetir como candidato a la DGA en 2023, para lo que defendió que se convoquen de nuevo primarias en su momento. «Una cosa va ligada a la otra», dijo en referencia a sus planes.

Aliaga apuntó por la mañana que la propuesta de celebración sería el 30 y 31 de octubre, pero se adelantó un fin de semana, dijo, para no coincidir con el puente de Todos los Santos y que no hubiera «suspicacias»._Los críticos exigían que fuera justo a la vuelta del verano, dado que se acumulan ya dos años de retraso y se aprobó en la anterior ejecutiva, en enero de 2020, que se celebrase este mes de junio. El líder se preguntó si «tan importante es para Aragón» que el congreso sea en una fecha u otra cuando aún falta dos años para las elecciones y tienen tiempo suficiente para armar un proyecto y preparar candidaturas. «¿Tengo yo otra vara de medir?», dijo.

La organización del congreso correrá a cargo de un comité de la confianza de Aliaga, hasta el punto de que solo un crítico, el alcalde de Montalbán, Carlos Sánchez, forma parte de un equipo formado por doce personas, cuatro por provincia más un representante del Rolde. Entre ellos, el secretario general, Joaquín Serrano, la diputada autonómica Esther Peirat o su asesora y presidenta intercomarcal de Zaragoza, Carmen Herrero.

Aliaga insistió en que no piensa dejar al PAR «abandonado a su suerte» ni a ser «un obstáculo» si hay otra candidatura, aunque por el momento los críticos siguen sin tener una alternativa después de que la exdiputada autonómica María Herrero declinara esta posibilidad. «Hay mucho teniente, pero hace falta un coronel dispuesto a liderar», argumentó uno de los implicados.

Renovación de ideas y personas

La única que alzó la voz públicamente fue la portavoz del PAR en la Diputación Provincial de Teruel, Berta Zapater, quien sin tapujos manifestó que Aliaga no representa la renovación que piden muchos, al igual que la entrada de gente joven a dirigir.

En el debate en la ejecutiva, que empezó a las seis de la tarde y se alargó hasta las ocho y media de la tarde, hubo muchos reproches a la situación actual del partido por la falta de vida interna, hasta el punto de sostener que estaba «muerto». En este sentido, se criticó en las intervenciones que no se haya reunido la ejecutiva en 18 meses y se haya paralizado el debate interno, como en Huesca, «sin que se puede poner de excusa la covid». También hubo coincidencia a la hora de reclamar renovación de ideas y personas, se censuró la falta de presencia en el territorio y se subrayó la necesidad de volver a ilusionar.

Aliaga centró su intervención en su gestión en la DGA, que nadie cuestionó pero que sirvió para que más de uno lo utilizara para «evidenciar» que hace falta discurso político y rearmarse ideológicamente.