El decreto de estado de alarma por la crisis sanitaria del covid-19 dejó a medias algunas adjudicaciones de la leña procedente de los daños forestales provocados por la borrasca Gloria, temporal que arrasó en varios montes. Estas subastas se retomarán en cuanto el Gobierno de Aragón levante los plazos administrativos para continuar con la tramitación, un paso que en el sector esperan que se dé en la primera semana de junio.
El Plan de Aprovechamientos Forestales del Gobierno de Aragón suele publicarse en torno a febrero. No sólo atañe a madera, también a setas, trufas, recursos apícolas, etc. Debido a la virulencia de la borrasca Gloria de enero, el procedimiento se hizo de urgencia, a través de un aprovechamiento forzoso en más de mil hectáreas de montes de utilidad pública y montes consorciados. Desde DGA se ocupan de la gestión de estos montes y de las adjudicaciones a las empresas en los consorciados. Los ayuntamientos realizan las adjudicaciones en los montes públicos. Las adjudicatarias pujan por cortar la leña, extraerla y ponerla en valor en la industria maderera ya sea como pellet, tabla, biomasa o lo que corresponda según el producto. «El temporal ocasionó el derribo de árboles y la acumulación de madera en el monte es un peligro por el riesgo de incendio. El objetivo era sacar esa leña cuánto antes de llegar a la época de máximo riesgo como es el verano y justo comenzó la pandemia y se suspendieron todos los plazos», dijo el director del Servicio Provincial de Desarrollo Rural y Sostenibilidad de la DGA, Pedro Polo. Señaló que «en zonas del Bajo Aragón como Ejulve o Alcorisa se llegó a poder realizar la subasta y a adjudicar esa madera resultante».
Trabajos de restauración
Sí que se han podido seguir realizando tareas durante el estado de alarma en estas zonas donde la madera sí tiene adjudicatario definido al considerarse una actividad agraria. Cumpliendo con todas las medidas de seguridad y nuevos y condicionantes se ha seguido extrayendo madera. La situación se ha hecho notar en la capacidad de reacción de las empresas ya que, «sólo el desplazamiento ha sido un problema» para ellas. Cabe recordar que durante un tiempo sólo se podía desplazar una persona en un vehículo y «para asuntos agrarios y forestales es un problema porque multiplica los gastos de la empresa».
Las cuadrillas siguen con las labores de restauración. «En muchos sitios hemos conseguido el objetivo de llegar a junio o julio con los deberes hechos», añadió Polo. En la actualidad calcula que hay entre 15 y 20 aprovechamientos en marcha. La Sierra Pelarda, entre Cuencas Mineras y Jiloca, es una de las áreas donde el temporal causó numerosos daños. También en Maestrazgo y en Bajo Aragón en localidades como Alcorisa, Ejulve o Foz Calanda. En los trabajos DGA empleó a medio centenar de personas. Para analizar la situación, delimitar y priorizar actuaciones, a comienzos de marzo, el director del Servicio Provincial de Teruel se reunió con los alcaldes de las zonas más afectadas.