Disfrutar de festivales que se celebran en castillos, bañarse en cascadas y embalses, hacer senderismo entre oliveras centenarias o recorriendo antiguas neveras de los siglos XVI y XVII, montarse en una locomotora a vapor o comer en un monasterio junto a sus frailes. Todas estas originales propuestas se pueden hacer cerca de casa y por menos de 30 euros. Si quieres viajar este verano, pero te preocupa el presupuesto, te proponemos diferentes planes diarios para disfrutar en familia o con amigos.
1. Conocer el poder de los árboles y el molino harinero de Aliaga
Lejos de lo que pueda parecer Cuencas Mineras cuenta con una gran cantidad de zonas de extenso arbolado. Es por eso que hace aproximadamente un año la comarca decidió formar a varios monitores de «baños de bosque». Se trata de una actividad centrada en dejarse inundar por la energía de la naturaleza y de los árboles a través de la interacción con la vegetación. Hablamos, por ejemplo, de paseos o de otras prácticas como tocar con nuestras manos las diferentes especies vegetales. En Aliaga puede practicarse esta curiosa actividad, tanto de forma guiada como de manera autónoma. Lo mejor es pasar por el Molino Alto, situado junto al río, y preguntar a los gerentes. Además de información, también podremos visitar el museo del molino y quedarnos en el restaurante a comer o cenar entre la antigua maquinaria.
- PRESUPESTO: ‘baños de bosque’ con los gerentes del Molino Alto + comida o cena en el antiguo molino
2. Disfruta de una tarde entre las cuevas de Montalbán y Molinos
Molinos ofrece uno de los espectáculos de la naturaleza más bonitos de todo el Bajo Aragón Histórico, sus Grutas de Cristal. Se trata de una cueva dividida en dos salas: la de los Cristales y la Marina. En ellas se encuentran suspendidas o bajo el agua una serie de curiosas formaciones o espeleotemas, que se dan tras la génesis de una cueva. Para quien quiera saber más sobre formaciones subterráneas Montalbán cuenta con el Centro de Interpretación de la Geología y Espeleología, ubicado en una antigua bodega. Se sitúa junto a la Iglesia y la experiencia es única, porque ofrece mucha información sobre el tipo de formaciones que pueden encontrarse en grutas como las de Molinos, pero también sobre el trabajo que desarrollan los espeleólogos.
- PRESUPUESTO: visita a las Grutas de Cristal con reserva previa en la web (9 euros por persona, 5 para menores de 12 años, y 7 para los mayores de 65 o grupos de al menos 30 personas) + visita al Centro de Interpretación de la Geología y Espeleología con la Oficina de Turismo de Montalbán
3. Crivillén, un viaje a la infancia del escultor español Pablo Serrano
Los crivillenenses cuentan con un gran orgullo entre sus calles, el escultor español Pablo Serrano, quien nació en la localidad de Andorra-Sierra de Arcos hace más de un siglo. Para rememorar la niñez del artista, uno de los más importantes en España durante el siglo XX, se pueden realizar varias visitas guiadas gratuitas que recorren el casco urbano, las eras y el mirador de Pilatos. Las salidas se realizan los días 10, 17, 20 y 24 de agosto. A unos 15 minutos se encuentra el pueblo de Estercuel y, siguiendo el valle del río, su preciado Monasterio de El Olivar rodeado de pinares, donde el dramaturgo Tirso de Molina creó algunas de sus obras. Allí se puede vivir una experiencia muy peculiar, comer en el propio comedor del lugar, el refectorio, junto a los frailes, compartiendo comida y mesa con ellos. Además, una vez en el santuario se puede aprovechar para visitarlo y observar algunos de sus rincones más bonitos, como la Iglesia.
- PRESUPUESTO: visita guiada gratis por Crivillén con la Oficina Comarcal de Turismo (reservar antes del día anterior a las 14.00) + comida en el Monasterio de El Olivar
4. La casa del molinero y el molino alto abren sus puertas al público
Los ejulvinos tienen muchos secretos bien guardados y uno de ellos es la existencia de su molino alto harinero, que funcionó hasta los años 60, y de la casa del molinero, que a día de hoy pertenecen a un particular. No obstante, tras la reciente restauración que se ha llevado a cabo, el dueño ha decidido abrir sus puertas de forma temporal este verano. Así, todo aquel que lo desee podrá acercarse, acompañado por el sonido del agua del río Guadalopillo, para apreciar la belleza e historia que ofrece este misterioso lugar. Se pueden realizar varias visitas guiadas gratuitas los días 9, 16, 21 y 23 de agosto. Las salidas comienzan en el área de autocaravanas de la localidad a las 09.30 y recorren 7 kilómetros ida y vuelta, unas 3 horas.
- PRESUPUESTO: visita guiada gratis al molino alto harinero y a la casa del molinero con la Oficina Comarcal de Turismo (reservar antes del día anterior a las 14.00)
5. Vive un festival en un castillo para viajar algunos siglos atrás
Vivir en la Edad Media y disfrutar de un festival con todos sus elementos parecen dos cosas que nunca podrían ir juntas. Sin embargo, la iniciativa de los Festivales de los Castillos une estos dos mundos. En esta edición se suman una vez más los pueblos de Valderrobres y Albalate del Arzobispo, que prestarán sus castillos unos días para que el público pueda vivir un fin de semana irrepetible. La primera cita es en la bonita localidad del Matarraña entre el 4 y el 6 de agosto. El jueves actuará el madrileño grupo de música No Reply; el viernes se presentará el teatro El Corral de García de Julio Llamazares, y el sábado se podrá disfrutar un teatro gestual de la mano de Clowing. Por otro lado, Albalate del Arzobispo será protagonista entre el 25 y el 28 de agosto. El jueves se dará un espectáculo de magia junto a Yunke; el viernes actuará la cantante premiada Tamara; y el domingo se presentará el teatro de comedia para todos los públicos de Descalzos Producciones.
- PRESUPUESTO: Entrada al Festival de los Castillos en Valderrobres y/o Albalate (15 euros la entrada anticipada de cada día, 18 en taquilla, 38 el abono para Valderrobres y 40 el abono para Albalate del Arzobispo)
6. Un paseo por la historia a través de oliveras centenarias
«Tierra de Centenarias» es el proyecto que ha puesto en marcha este año el Bajo Aragón para dar a conocer sus oliveras más longevas, que consiste en itinerarios que incluyen los términos de La Codoñera, Belmonte de San José y Torrevelilla, todos ellos en el Mezquín. Los senderos señalizados están a disposición del usuario para su libre disfrute. El visitante puede pasear entre las oliveras de Santa Lucía, de Mir y de la Tellería en el caso de La Codoñera. En el caso de Belmonte, la gran Olivera de Cervera es una de las protagonistas y además fue catalogada como Árbol Singular de Aragón. Además de estos pueblos, en las rutas se incluirá La Cañada de Verich, La Ginebrosa, Aguaviva, Las Parras, Jaganta, Alcorisa, Berge, Calanda, Castelserás, Torrecilla, Alcañiz y Valdealgorfa. El objetivo es que el visitante pueda aprovechar su estancia en la zona para conocer estos pueblos en los que comer o incluso pernoctar.
- PRESUPUESTO: comida en alguno de los pueblos por los que discurre ‘Tierra de Centenarias’
7. Calanda muestra su parte más desconocida, los parajes naturales
Calanda cuenta con tranquilos y espectaculares parajes naturales dignos de visitar cualquier tarde o mañana de agosto. Para pasear algún día por las zonas más naturales del pueblo se puede decidir realizar un pequeño fragmento de la Ruta de los Arcos, que originalmente llegaría hasta Las Cananillas del río Bergantes, cerca de Aguaviva. En este caso, solo se recorrerían las paradas calandinos, desde un punto de la localidad con vistas al Acueducto de los Arcos hasta el embalse del municipio. Una vez allí, se puede aprovechar para refrescarse y darse un baño en las aguas de este conocido pantano. Cuenta con un merendero y barbacoas, (es necesario pedir la llave al ayuntamiento para utilizarlas), donde, tras nadar un poco, se pueden recargar las pilas para la vuelta a casa. Para los más aventureros, también se puede subir al Monte Tolocha, un peculiar lugar con tres cimas, desde donde disfrutar las maravillosas vistas que ofrece del valle del río Guadalope, el pantano de Calanda y varios de los pueblos del Bajo Aragón.
- PRESUPUESTO: comida y bebida para disfrutar del merendero y las barbacoas calandinas
8. Refúgiate en la Ruta de las Bóvedas del Frío del Bajo Aragón
Una de las travesías más conocidas del Bajo Aragón es la Ruta de las Bóvedas del Frío, una ruta temática a través de las múltiples neveras rehabilitas que fueron construidas en esta zona durante los siglos XVI y XVII para mantener fríos aquellos alimentos que lo necesitaban. La gran mayoría de ellas cuenta actualmente con iluminación, música y locuciones para ilustrar y explicar cómo funcionaban y cómo era la vida de la gente en épocas pasadas. Es un trayecto que recorre 127 kilómetros de la comarca desde Alcañiz hasta la Mata de los Olmos, con un breve desvío hacia Calanda y Foz-Calanda. No obstante, para quienes no tengan tanto tiempo o presupuesto se puede realizar por fragmentos. Para recargar energías todos los pueblos que se visitan cuentan con bares o restaurantes en los que parar una hora para almorzar, comer o cenar y observar más detenidamente algún municipio.
- PRESUPUESTO: visita a las neveras con las oficinas de turismo locales + comida en algún municipio incluido en la ruta
9. Una excusa para conocer a Braulio Foz, el escritor de Fórnoles
Braulio Foz fue un gran escritor y periodista aragonés, fundador, director y redactor del diario ‘El Eco de Aragón’, que nació en Fórnoles, una localidad matarrañense que aún conserva su casa natal, convertida en museo. Mantiene algunas zonas como eran entonces, como la alcoba y el escritorio, y otros enseres. También cuenta con una sala multimedia con explicaciones. Finaliza la visita, se puede dar un paseo por el municipio, que perteneció a la Orden Calatrava y que esconde bonitos rincones como el casco urbano, la imponente iglesia gótica o su ermita de la Virgen de Montserrat, rodeada por frescos cipreses. Para darse un baño y refrescarse después de una jornada recorriendo calles, a tan solo 13 kilómetros se encuentra el Salt de La Portellada, el espectacular salto de agua del río Tastavins, uno de los lugares más bonitos de la comarca con un cascada de unos veinte metros de altura.
- PRESUPUESTO: visita a la casa natal de Braulio Foz
10. Viajar en el ferrocarril de Andorra y museo al aire libre en Alloza
En cualquier momento se puede viajar con coche, avión, barco o ave, pero en pocas ocasiones se presenta la oportunidad de montar a bordo de una auténtica locomotora a vapor, ya que las últimas dejaron de funcionar a finales del siglo XX. No obstante, esta curiosa posibilidad se encuentra más cerca de lo imaginado. En concreto, en la comarca de Andorra-Sierra de Arcos, en la antigua línea minera que unía las localidades de Andorra y Escatrón. El tren minero «Pozo de San Juan» (Museo MWINAS) es un maravilloso ferrocarril que dejó de hacer viajes el 2 de agosto de 1984, convirtiéndose así en una de los últimas líneas en activo en Europa hasta ese momento. Las visitas se realizan fines de semana y festivos mañanas y tardes. Tras disfrutar de la gastronomía local en alguno de los bares o restaurantes de la localidad, podemos conducir unos kilómetros hasta Alloza. En el mismo pueblo se puede acudir gratuitamente al Parque Escultórico Los Barrancos, un espacio cultural integrado en la naturaleza. En él se muestra la obra de múltiples escultores, como «Observador observado», «Nuestros abuelos» o «Dama acostada ».
- PRESUPUESTO: montar a bordo del tren minero ‘Pozo de San Juan’ (4 euros por persona y gratis para menores de 4 años) + visita al museo MWINAS (3 euros por persona) + comida en un establecimiento local + visita gratuita al Parque Escultórico Los Barrancos
El mejor plan, quedarse en casa, con ventanas cerradas y persianas echadas, ahhh y sin encender el aire acondicionado, pues entoces ya es Low Cost….
Low cost es irte a dar un paseo por el rio, tomar la fresca bajo un chopo y comerte un pincho de tortilla que te has llevado en una fiambrera. 30 euros por persona/día es un lujo para muchos. Sale más barato un viaje programado a benidorm.
Low cost es ir a dar una vuelta a medio día por el campo, te da un golpe de calor y te vas a un hospital en un todo incluido. A estas alturas y con la que está cayendo hay que sacar un poco de humor con lo que se pueda, porque da mala gana hacer cualquier cosa.
Un fuerte abrazo bien fresco para l@s sanitar@s, que se lo merecen.