El Ayuntamiento de La Portellada contará con 5 viviendas adaptadas para personas de la tercera edad. Los pisos no contarán con ninguna barrera arquitectónica y estarán dirigidos a personas no dependientes, consideradas en el argot de la dependencia como «personas válidas» y que sin embargo no puedan residir en sus hogares debido a distintos problemas de movilidad reducida. De este modo, el consistorio quiere evitar que muchos de sus vecinos de la tercera edad, pese a estar en plenitud de sus facultades mentales, deban abandonar el municipio para trasladarse a otras viviendas de familiares sin barreras arquitectónicas e incluso ingresar en un Centro de Mayores ante la imposibilidad de acceder a sus viviendas o desplazarse por ellas.
En la mayor parte de los casos son las escaleras, muy frecuentes en las viviendas de los cascos urbanos tradicionales, las que hacen desistir a sus moradores de poder continuar residiendo en ellas. Las viviendas, en pleno centro, estarán ubicadas en una planta del edificio multiusos que ya alberga el Hogar del Jubilado. «No nos podemos permitir contar con una residencia. Sin embargo tenemos este espacio municipal y pensamos que es una alternativa muy interesante para que nuestros mayores no se vean obligados a irse de La Portellada antes de tiempo», explicó Gloria Serrat, alcaldesa de La Portellada.
Dos de los cinco pisos adaptados serán una realidad este mismo mes o en abril gracias a un FITE de 110.000 euros. Sin embargo quedará pendiente de adecuación el acceso a los inmuebles. Por ello, mientras llegan nuevos fondos, el consistorio alquilará los dos nuevos pisos a familias jóvenes. Todo ello, tras finalizar la reforma de la antigua vivienda de los maestros y que albergará a una nueva familia. «Tenemos varias familias interesadas y lista de espera. Ahora valoraremos a cual de todas se le adjudica el alquiler», añadió Serrat.
Nuevo solar listo para construir
En la línea de poder facilitar el acceso a la vivienda, el consistorio adquirirá un solar en las inmediaciones del centro urbano para parcerlarlo y vender solares listos para edificiar y facilitar así que las familias puedan construirse una vivienda. Una iniciativa similar se llevó a cabo hace casi 2 décadas en la calle Pedrera y fue todo un éxito facilitando que muchas parejas jóvenes deciesen, en aquel momento, construirse su casa en la localidad. «Los 20 alumnos que tenemos ahora en la escuela, son casi todos hijos de las familias que se pudieron hacer una casa en esta calle así que queremos que pueda repetirse algo similar», añadió la alcaldesa.