La compleja situación económica provocada por el covid-19 no ha logrado doblegar la tendencia ascendente de producción que la DOP Jamón de Teruel y Paleta de Teruel viene registrando en los últimos años. Cerrados los datos de 2020, el marcaje en curado de ambos productos con Denominación de Origen Protegida ha crecido un 22,92%, pasando de una producción total de 392.607 en 2019 a una de 482.608 piezas en 2020. El presidente del Consejo Regulador, Ricardo Mosteo se mostró satisfecho con estos resultados en «un año muy complicado, en el que el sector de la DOP Jamón de Teruel no solo ha conseguido resistir sino que ha mantenido una evolución favorable en su producción».
En concreto, el Jamón de Teruel DOP en curado registra en el pasado año un crecimiento notable, con un total de 349.161 piezas marcadas en los secaderos, cifra que supone un incremento del 23,40% con respecto al año anterior, en el que se certificaron 282.962 jamones de Teruel.
En cuanto al marcaje en curado de Paleta de Teruel, también experimenta un destacado crecimiento del 21,70%: pasando de 109.645 piezas certificadas en 2019, a las 133.447 en 2020.
Jamón y paleta en fresco
Atendiendo a la entrada de Jamón de Teruel y Paleta de Teruel en fresco, también se ha experimentado un crecimiento conjunto en el marcaje del 5,28%. Por productos, el jamón de Teruel en fresco muestra un leve descenso del 5,42% y pasa de un marcaje de 375.932 piezas en 2019 a 355.549 en 2020. La paleta, sin embargo, aumenta su producción en un 29,63%, de 165.209 en 2019 a 214.164 en 2020.
Digitalización
La pandemia también ha favorecido la digitalización de las empresas acogidas a la DOP, para adaptarse así a la nueva situación y poder continuar con normalidad en sus actividades. Esa digitalización ha permitido un aumento de las compras online, otro de los cambios destacables que se han producido en el sector de la DOP Jamón de Teruel durante la pandemia. Las restricciones de movilidad y el confinamiento en 2020 han supuesto cambios en los patrones de consumo de las familias, que fueron abandonando el consumo en restaurantes en favor del consumo en casa.
Además, este Consejo Regulador también se convirtió en la primera Denominación de Origen de España en realizar un estudio del ciclo de vida de su producto con el fin de conseguir una foto fija del impacto medioambiental que tiene la elaboración de sus productos y conocer en qué aspectos o partes del proceso se podría reducir esa huella para aumentar la sostenibilidad.
El Consejo Regulador ha cerrado el año 2020 con 148 granjas inscritas; 34 secaderos, 19 salas de envasado, 7 fábricas de piensos, 9 salas de despiece y 9 mataderos.