El colegio de Ráfales no solo se salva si no que aspira a crecer. El Ayuntamiento solicitará la ampliación del centro educativo tras el aumento de nacimientos en los últimos años así como de la llegada de nuevas familias con niños a la localidad. Los 14 alumnos con los que cuenta actualmente el centro educativo han hecho que las instalaciones, que datan de los años 50, se hayan quedado pequeñas. Desde el inicio de este curso, los desdobles de varios de los cursos deben llevar a cabo sus clases en varias de las salas de la casa consistorial.
Además del espacio, el edificio se ha quedado obsoleto por la antigüedad de su diseño. Por todo ello desde el consistorio confirmaron que están trabajando ya, junto con el servicio de Educación, para dar luz verde a la ampliación del actual edificio educativo y poder ganar así una nueva aula, además de renovar y adecuar las actuales instalaciones. Pese a la demanda que plantean desde la localidad, que tan solo suma 140 habitantes, no ocultaron su satisfacción por el aumento de niños experimentado en los últimos años. «Estamos contentos e ilusionados porque hacía muchos años que no teníamos tantos alumnos, así que ahora estamos trabajando en buscar una solución para ampliar y actualizar el edificio», explicó Jose Ramón Arrufat, alcalde de Ráfales.
Todo ello después de varias décadas consecutivas de pérdida de población. Una regresión demográfica que ha sido constante e imparable desde los años 60. La localidad contaba con 616 habitantes en los años 50 y llegó a superar los 800 habitantes a principios del siglo XX. Sin embargo y pese a la gran historia que atesoran sus calles y casas solariegas la localidad ha sido, como el resto de la provincia, víctima de la despoblación.