DGA confirma que Podemos detrajo 9,2 millones y la formación asegura que es un «error»
La construcción del nuevo Hospital de Alcañiz ha sufrido el enésimo varapalo que viene a constatar lo que ya se había anunciado: en 2017 se hará poco más que adjudicar y colocar la primera piedra del futuro centro sanitario. Las Cortes aprobaron el miércoles los presupuestos de Aragón para 2017, que estarán en vigor escasamente medio año. Contaron con el voto favorable de los grupos de centro-izquierda (PSOE, CHA, IU y Podemos) y la negativa del centro-derecha (PP, PAR y Ciudadanos). La partida del Hospital se ha desinflado del texto que entró en las Cortes tras la enmiendas del grupo Podemos. Pasa de 11,4 a 2,1 millones. Esta reducción evidencia lo que ya anunció el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, hace solo unas semanas: este año no se van a ejecutar los 11 millones previstos debido a todo el tiempo que se ha perdido con los trámites administrativos, paralizados hasta ahora a la espera de la aprobación de las cuentas. No obstante, nadie pensaba que la reducción iba a ser tan fuerte aunque algún grupo sí propuso detraer partidas entendiendo que en seis meses no se pueden ejecutar los 11 millones.
Según confirman desde el departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón al igual que aparece reflejado en el documento que el miércoles se entregó a los diputados en Cortes, Podemos presentó enmiendas por valor de 9,2 millones para detraer partidas del Hospital a otros gastos sanitarios. Concretamente: 6,7 millones para el plan de alta tecnología, 1 millón destinados al plan de crónicos, 1 millón para el programa de acceso al tratamiento de hepatitis C, 500.000 al Hospital de Teruel y 50.000 euros para el grupo de listas de espera.
Sin embargo, desde Podemos lo niegan y aseguran que no han restado dinero para el Hospital sino que han aumentado un millón más pasando de 11,4 a 12,4. No obstante, desde DGA aseguran que este cambio no se tiene en cuenta porque la formación morada proponía detraerlo de la propia partida del centro sanitario alcañizano, por lo que se quedaría igual.
La diputada alcañizana Marta Prades asegura que se trata de un «error» porque su intención era aumentar el presupuesto. «Que ellos lo hayan reflejado así no significa que sea lo que negociamos. El año pasado ya hubo errores que descubrimos cuando los presupuestos se publicaron en el BOA. Lo analizaremos», afirma.
Una constructora ha presentado un recurso
A la ínfima financiación se le suma un nuevo problema que podría retrasar aún más los plazos. Una de las constructoras que se presentaron al proceso de licitación ha presentado un recurso por el hecho de que no se contemplara una de las variantes al proyecto que propuso. Por tanto, ahora es el Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (TACPA), quien tiene la última palabra. En caso de que acepte el texto de la constructora, obligará a Sanidad a calificar la variante.
Al margen de este recurso, aunque ya se conocen las ofertas presentadas, antes de adjudicar queda un largo proceso (ver en el cuadro adjunto). La empresa que presentó la mejor oferta, aunque rozando la baja temeraria, es la UTE OHL-Dragados, que tampoco se libra de los problemas judiciales. OHL fue registrada en abril por la Guardia Civil por su presunta vinculación con la financiación irregular del PP estatal. Javier López Madrid, quien acaba de dimitir como directivo, está imputado y en libertad bajo fianza por, presuntamente, estar detrás del pago de comisiones al expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, a cambio de obra pública.