El Consejero de Sanidad, José Luis Bancalero, defendió el viernes en pleno de las cortes de Aragón que la reducción del servicio de limpieza Hospital de Acañiz y otros cinco centros de salud bajoaragoneses- Caspe, Maella, Calanda, Andorra y Valderrobres-, se debe «a una reorganización propia e interna de la contrata», y que su plan de trabajo «se está cumpliendo escrupulosamente«. Todo ello después de que la multinacional Acciona, que lleva gestionando el servicio desde el 1 de enero, despidiera a cuatro trabajadores y redujera la jornada a otras dos, lo que redunda en la calidad del servicio en un sector tan delicado como el de la sanidad y también sobrecarga de trabajo al resto de la plantilla, tal como denunciaron los sindicatos.
A preguntas del diputado socialista, Iván Carpi, sobre qué medidas ha adoptado el Ejecutivo para exigir el cumplimiento del contrato de limpieza y la «dignidad» de los empleos, el titular de Sanidad se mostró tajante, defendiendo que su departamento «cumple con la normativa laboral y cuida a sus trabajadores». Carpi denunció el recorte del servicio de limpieza y lavandería que han sufrido los centros sanitarios bajoaragoneses- en un «servicio fundamental en la cadena sanitaria»-, una situación que ha derivado en «cambio de los turnos, división de las jornadas y trabajo pendiente por hacer». «Se están produciendo hechos como que un limpiador/a tenga que trabajar en un espacio mucho más grande del que antes hacía, en menos horas», aseveró el socialista.
Unas denuncias que fueron rebatidas por el consejero de Sanidad, quien aseguró que la adjudicataria se comprometió a ejecutar el contrato «de acuerdo con el plan de trabajo», y que «se está cumpliendo según las condiciones de la empresa». «El adjudicatario puede considerar que en lugar de dos medias jornadas para dos trabajadores, se haga una jornada completa un trabajador», insistió. «Eso no es dejar de prestar un servicio ni recortar, eso es reorganización propia e interna de la contrata, que tiene autonomía para organizar a su personal como considere», respondió.
Bancalero se refirió por ejemplo al centro de salud de Calanda, donde se ha despedido a una de las dos trabajadoras y a la que se queda se le ha cambiado la jornada que pasa a ser partida. «Se reciben incidencias en el centro de salud de Calanda, las cuales se ponen en conocimiento de la empresa y esta ajusta horario de la limpiadora, las mañanas de 7.00 a 11.40 y las tardes de 17.00 a 19.00 de lunes a viernes, para cubrir dichas incidencias», detalló.
Carpi exigió al consejero «asegurar el control del contrato tras los despidos y los recortes, asegurar el cumplimiento de la normativa laboral y evitar la explotación de los trabajadores», señalando que «el servicio ha empeorado y ha disminuido su calidad». «Creo que es una preocupación de usted muy especialmente», le advirtió. El titular de Sanidad le recordó que fue el gobierno socialista el que firmó el convenio que ahora está vigente y aseguró que el Departamento de Sanidad esta «alerta» ante cualquier deficiencia que se puedan producir en el servicio. «Nosotros somos cumplidores escrupulosamente. Este Departamento cumple con la normativa y cuida a sus trabajadores».
Denuncias de los sindicatos
Acciona lleva desde el 1 de enero gestionando la limpieza de tres sectores sanitarios aragoneses, los de Alcañiz, Teruel y Barbastro al ganar el concurso del Salud en la anterior legislatura. El alcañizano salió a licitación por 6,48 millones y se lo quedó la multinacional con una oferta de 5,4. Sin embargo, es el de Alcañiz el único sector en el que se han producido despidos y reducciones de horas de limpieza según confirma Leonor Gil, presidenta del Comité de Empresa en la provincia de Teruel por CCOO, quien matiza que se unen a los puestos que se han ido amortizando y que les llevaron a reclamar ante el anterior ejecutivo los pliegos del contrato sin obtener respuesta.
Estos recortes se han llevado a cabo ahora después de meses de reuniones entre Acciona y el Salud en las que la empresa alegaba que en el sector de Alcañiz había más trabajadoras que las que establecía el contrato. Fuentes de la consejería de Sanidad aseguran que van a exigir que se cumpla el contrato establecido, pero en cómo se organice la empresa no se pueden inmiscuir «siempre que cumpla las condiciones».