Los malhechores realizaron destrozos pero no se llevaron ningún objeto de valor
El campin municipal de Alcañiz, que lleva más de un año cerrado, ha sufrido dos actos vandálicos en menos de dos meses. El último, en Semana Santa, cuando un grupo de personas entró en el recinto y destrozó parte de su mobiliario, lo que agrava aún más la decadente situación de la instalación. Los hechos ya han sido denunciados en la Guardia Civil y varios agentes se personaron en el campin para recabar huellas.
Varias fuentes aseguran que se podría tratar de alguna «venganza personal» contra el campin puesto que los asaltantes tan solo destrozaron los bungalós pero no se llevaron ningún objeto de valor. Otro de los hechos que hacen sospechar es que entraron en el recinto abriendo con llave el candado de la verja principal. Después, se dirigieron a la caseta de recepción para coger las llaves de los bungalós, en los que entraron en buena parte de ellos. En las viviendas que no pudieron acceder por la puerta lo hicieron a la fuerza. Algunas de las casetas (hay 37 en total), las abrieron rompiendo las ventanas o arrancando las puertas. Por ejemplo, accedieron a una de las cinco viviendas propiedad de particulares utilizando un extintor que previamente habían arrancado. En este caso, no encontraron ningún objeto de valor porque su dueño ya se había llevado todas sus pertenencias. Aún está a la espera de la valoración del seguro pero en el anterior acto vandálico sufrió pérdidas por valor de 500 euros.
Sorprende que los malhechores no se llevaran ni los televisores de los bungalós ni otros electrodomésticos como pequeñas neveras o mobiliario, algunos de ellos en muy buen estado. «Esto nos hace sospechar que no querían robar, solo hacer daño a la instalación», explica una persona que anteriormente residía en el campin.
En el espacio que cuenta con objetos de mayor valor, el restaurante, no entraron, al igual que en algunas casas de propietarios.
Aún no se han abierto las ofertas
Mientras tanto, el recinto está a la espera de encontrar un gestor que lo vuelva a poner en marcha gracias al segundo concurso en pocos meses. El anterior proceso de licitación quedó desierto debido a que la única empresa que había presentado una oferta no entregó la documentación necesaria. Hace dos semanas terminó el plazo para presentar nuevas ofertas pero aún no se ha reunido la mesa de contratación municipal para valorar las propuestas. Por ello, desde el equipo de gobierno aseguran que prefieren no desvelar el número de ofertas que se han presentado.
Para que esta cifra sea mayor se cambió en este proceso las condiciones del contrato, mucho más ventajoso que el anterior. Ahora es el Consistorio el que asume la inversión necesaria para abrir la instalación aunque el gestor pagará un canon más alto (de 3.500 a 8.150 euros anuales). El Ayuntamiento acometerá las obras de instalación de la red de agua potable y de saneamiento, valoradas en alrededor de 180.000 euros.