La alcaldesa de Andorra dice adiós a la política tras ocho años como alcaldesa y otros tantos como teniente alcalde
¿Por qué decide no presentarte a las próximas elecciones?
Es una decisión tomada, valorada y pensada con la familia. Decidí presentarme a la última legislatura con todas las consecuencias: si ganaba las elecciones, terminaría hasta el final; y si no, la decisión ya estaba tomada. Creo que ocho años como alcaldesa es más que suficiente para gobernar en una localidad y dar paso a gente nueva.
Su marcha de la política, ¿es un adiós o un hasta luego?
Va a ser un hasta luego. He decidido que no voy a estar en primera línea, pero voy a estar colaborando en todo aquello que Izquierda Unida necesite. Han sido 16 años trabajando para el pueblo y creo que nunca se puede decir adiós.
¿Izquierda Unida ya tiene el nombre de la persona que le sustituirá en las listas?
Lo estamos valorando y estamos viendo cómo confeccionar esa lista. Todavía es pronto y no anunciaremos el nombre hasta el último momento.
Se marcha del Ayuntamiento y deja atrás ocho años en los que ha gobernado, pero no ha sido fácil. Primero con el apoyo del Partido Popular y después con el apoyo de la izquierda. Acuerdo que se acabó rompiendo.
Siempre hemos gobernado en minoría. Es cierto que la situación política ha dado un giro radical desde mi época con Luis Ángel Romero como teniente alcalde. Antes el Ayuntamiento tenía tres partidos y ahora somos seis. La capacidad de llegar a acuerdos y de diálogo no es la misma, es muy complicado. Si hablamos de la última legislatura, podríamos hablar de un bloqueo por sistema. Fue más fácil el entendimiento en la primera legislatura, porque estos últimos cuatro años hemos sobrevivido con presupuestos prorrogados y haciendo uso de una moción de confianza para aprobarlos. Sin unos presupuestos es muy difícil gobernar un Ayuntamiento.
Hablaba antes del diálogo. El PSOE la calificó como «soberbia» y «autoritaria». ¿Se considera usted una persona dialogante?
No creo que sea soberbia ni dictadora. Estamos cansados de convocar a todos los partidos a las diferentes comisiones informativas o juntas de gobierno convocadas para sentarnos a dialogar. No sé porque dirían eso, pero lo cierto es que llevamos meses intentando que nos sentemos en una mesa para negociar los presupuestos y no lo consigo. Quizás la culpa no es de la alcaldesa ni del equipo de gobierno, si no que no se quiere dialogar. Tenemos que ser todos más flexibles.
«No creo que sea soberbia ni dictadora. Quizás la culpa no es mía, si no de que no se tiene voluntad por dialogar»
San Macario es sin duda el ejemplo más ilustrativo de lo que habla. Su gran proyecto era reconvertirlo en hotel. Proyecto que no consiguió salir adelante.
Es un claro ejemplo de lo que está pasando en Andorra. No conozco ningún pueblo en el que se vote en contra de un proyecto por el que el Ayuntamiento llevaba buscando financiación durante 10 años. El proyecto se bloqueó de una manera que hoy todavía no podemos comprender porque los argumentos de la oposición no son suficientes. Nos dan 820.000 euros para rehabilitarlo y nos lo bloquean porque «no era el momento».
Otro de los hechos que han marcado la última legislatura ha sido la disolución de la Sociedad Municipal para el Desarrollo de Andorra (Somudan). ¿Qué le parece?
La propuesta va en la línea de lo que ha hecho durante todo este tiempo el Somudan. Ellos proponen que esta oficina no sea «teledirigida» por parte política, si no que sean técnicos objetivos los que se encarguen de liderarla. Puede ser una alternativa, aunque lo cierto es que ya existía con la Sociedad Municipal. Entonces se hizo un trabajo excelente con la colaboración de todas las partes y siempre ha habido consenso. ¿El problema?, que con tanto color político era complicado hasta llegar a acuerdos para comprar un cenicero.
Hablaba del «trabajo excelente» del Somudan. ¿Cuáles son sus grandes logros?
La Sociedad Municipal surge en el 2000 y hasta el 2008 el trabajo da sus frutos. Se llega al pleno empleo y se llegan a instalar diferentes empresas en los polígonos. El problema es que estas empresas estaban relacionadas con el sector de la construcción y la llegada de la crisis económica hace que proyectos como el de la cementera no se lleguen a ejecutar. Puedo decir que a lo largo del año son muchas las empresas que preguntan por las posibilidades de instalarse en Andorra, pero son otros los inconvenientes que les llevan a irse a otros territorios.
«Son muchas las empresas que preguntan por las posibilidades de instalarse en Andorra, pero son otros los inconvenientes que les llevan a irse a otros territorios»
Se refiere a la época del 2000 al 2008, pero, ¿qué consiguió el Somudan en los 10 años siguientes?
La culpa no es del Somudan. Creo que bastante hemos hecho para mantener el empleo local en aquellos momentos tan complicados. En esos momentos ni siquiera los bancos facilitaban líneas de crédito a las empresas para salvar el día a día y el Somudan facilitó estas líneas de ayudas. Gracias a estas ayudas pudimos mantener empleo en Andorra y evitar que empresas, como Andopack o Gres Andorra, tuvieran que cerrar. Creo que este es uno de los ejemplos por los que estamos orgullosos del trabajo realizado por Somudan.
Meses después de anunciar que no se presentaría a las elecciones, Endesa confirmó el cierre de la Central. Muchos dirán que deja la política en el peor momento para el pueblo.
A principios de esta legislatura ya dije que era la última vez que me presentaba, para lo bueno y para lo malo. Sabíamos que el futuro de la Central era un punto clave para Andorra y la incertidumbre que nos ha rodeado durante los últimos años ha sido tremenda. Yo no sabía la fecha en la que Endesa iba a presentar la solicitud de cierre. Ahora me tocará luchar desde un segundo plano, pero lo cierto es que todavía no se ha autorizado el cierre. Nosotros exigimos al Ministerio que no lo autorice porque el plan alternativo que presenta Endesa no es el adecuado.
«He hecho todo lo posible por buscar alternativas para Andorra, pero todos los problemas no tienen solución. De igual modo, ha habido falta de interés político»
¿Siente, de alguna manera, que deja a Andorra en la estacada?
Se quedan cosas sin hacer, como imagino que le pasará a todo el mundo, pero hay que tener en cuenta que nos encontramos en un momento muy complicado. Me voy orgullosa por haber hecho todo lo que podido por buscar alternativas y un futuro para Andorra. Todos los problemas no tienen solución. No se han hecho los deberes donde se tendrían que haber hecho, que es desde los gobiernos de España y Aragón, porque ha habido falta de interés político.
Se habla de alternativas y de reindustrialización. Para usted, ¿cuáles son las soluciones para Andorra?
No se puede permitir el cierre de la principal actividad económica de la provincia de Teruel sin alternativas, sin proyectos que aseguren empleo. Endesa tiene su parte de responsabilidad, porque pretende irse de rositas después de haber hecho mucho dinero aquí, y también el Gobierno de España. No se pueden generar nuevos proyectos si no tenemos comunicaciones dignas, tanto de carreteras como internet, apostamos por una serie de incentivos económicos y fiscales para las empresas que quieran venir hasta aquí… Hablamos de asuntos que venimos demandando desde hace años.
¿En qué se han invertido los fondos del FITE o del Miner?
Hemos intentado adecuar nuestros polígonos industriales cuando había oportunidades para que llegaran empresas. Los deberes de Andorra están hechos, aunque es cierto que uno de los problemas es que no podemos pretender que cada pueblo tenga su propio polígono industrial. También es cierto que se han repartido las ayudas de una forma que no nos han favorecido. Quizás las ayudas que hemos recibido no han sido las más adecuadas o el apoyo institucional no ha sido el mejor.
El cierre de la Central se traducirá en una pérdida de empleos masiva y de dinero para las arcas municipales.
Hablamos de más de un millón y medio de euros que supone el 30% del presupuesto municipal, que es lo que hace mantener nuestros servicios y plantilla municipal. Nos va a repercutir de forma muy negativa y por eso exigimos alternativas. Insistimos en que se mantenga la infraestructura de la Térmica y se busque otra actividad generadora de empleo para mantener los ingresos. Otra manera es que Endesa mantenga estos convenios y de forma progresiva el Ayuntamiento deje de percibir estos ingresos.
Otro tema que ha afectado de lleno a Andorra ha sido el triple crimen. Quedan todavía interrogantes por resolver.
Sin duda es la peor vivencia desde que entre en el Ayuntamiento de Andorra hace 16 años. Es algo que no tendría que haber sucedido y seguimos sin entender cómo ocurrió, porque ya se dieron avisos de que algo estaba pasando en la zona desde la doble tentativa de homicidio en Albalate. No hay palabras para expresar los momentos tan duros que pasamos todos los andorranos tras conocer la muerte de José Luis y de los dos agentes de la Guardia Civil. Seguiremos peleando por conocer toda la verdad. Se tienen que dar las explicaciones porque, por ejemplo, desde Subdelegación del Gobierno se mintió y se tienen que depurar responsabilidades.
¿Cómo se imagina el futuro de Andorra dentro de cinco años?
Andorra es un pueblo vivo, luchador y saldrá adelante pase lo que pase. Solo espero que toda esa gente que se quiere quedar a vivir en Andorra lo pueda hacer porque tienen alternativas. Nos hace falta creer más en nosotros mismos, pero sé que seguiremos luchando por nuestro futuro.