El Rosario de Cristal puso la sobriedad en la noche de miércoles tras un martes marcado por el desfile de carrozas
Híjar vive inmerso en sus fiestas en honor a Nª Sª de la Virgen de Arcos y Nª Sª del Carmen, aunque ya han tenido lugar varios de los principales actos que llenan las calles estos días. Uno de ellos es el Rosario de Cristal, una cita que cada 21 de agosto saca a la calle a cientos de personas para participar en una de las tradiciones únicas en el Bajo Aragón. Decenas y decenas de faroles iluminaron la noche hijarana en su descenso des de la ermita del Carmen por el camino serpenteante hasta llegar a la carretera. Allí se unió el paso de la virgen y los Rosarieros que entonaron sus coplas durante todo el recorrido hasta su finalización en la iglesia parroquial.
Híjar cumple con su costumbre más genuina y sobria de sus fiestas patronales que tuvieron por la mañana la procesión del Pan Bendito y el martes, uno de los grandes momentos como es el desfile de carrozas.
Multitudinarias carrozas en Híjar
El martes fue el turno del desfile de 25 carruajes protagonizados por una gran variedad temática. Por delante, los hijaranos todavía tienen varias jornadas festivas hasta el cierre de las fiestas del sábado.
El desfile de las carrozas es uno de los principales atractivos de las patronales de la capital del Bajo Martín. Arrancó sobre las siete de la tarde del martes y congregó a más de una veintena de peñas participantes, a las que se sumaron decenas y decenas de vecinos, que siguieron muy de cerca el desfile. La temática elegida por los concursantes fue muy diversa.
Desfilaron, por ejemplo, un tributo al grupo musical Queen; una simulación a un limpia coches mecánico; e incluso una representación de los jóvenes vecinos de la localidad de aquí a un siglo, cuando estos ya serán los ancianos del pueblo. Además, también aparecieron guiños a series televisivas como «Vis a Vis» o a los trabajadores de las placas solares que se encuentran por la zona.
El inicio de estas fiestas tuvo lugar con el pregón en la noche del lunes, a cargo del joven biatleta Pablo Turón. El biatlón es un deporte muy seguido en los países nórdicos, pero resulta menos conocido en España. No obstante, Turón se ha convertido en un gran embajador de este deporte en el territorio, ya que está cosechando importantes triunfos en esta modalidad, que combina el esquí de fondo con el tiro de precisión.
«A mis padres siempre les ha gustado ir a la nieve, esquiar… Y desde pequeño practico esquí de fondo, me empezaron a ver que iba bien, quisieron meterme a competir y poco a poco fue a más y al final me acabaron poniendo una carabina a la espalda», explicó el hijarano, que subido al balcón del Ayuntamiento proclamó el pregón que supuso el inicio de las fiestas, que continúan a lo largo de la semana.
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