La consejera Gastón asegura que es una sorpresa que hayan tardado 10 años en poner en duda las ayudas
La apertura de una investigación en Europa para resolver si las ayudas que el Gobierno central ha estado dando a las centrales de carbón desde 2007 ha puesto en guardia al sector minero-eléctrico de la cuenca minera de Andorra. El presidente del comité de empresa de la térmica, Hilario Mombiela, lamentó que este paso dado en Bruselas supone otra «piedra en el camino». «Después de los últimos movimientos con el Real Decreto, nos aparece un tema más que lo que hace es ponernos más piedras en el camino de cara al futuro de la térmica de Andorra «, dijo ayer.
Europa cree que este plan de incentivos podría haber provocado una competencia desleal frente a otras formas de producir energía y no haber servido para instalar filtros que redujeran las emisiones de azufre a la atmósfera. En ese sentido, Mombiela subrayó que los tres grupos de la central apenas emiten azufre desde mediados de los noventa. Fue a raíz de una querella que interpusieron los municipios de las comarcas del Maestrazgo y Les Ports contra Endesa. «Se instaló la desulfuración y se indemnizó a los pueblos», recordó.
Endesa confirma este aspecto pero también reconoce que entre las 14 centrales incentivadas se encuentra la andorrana. Por su parte, el Ministerio de Energía defendió ayer que el sistema de incentivos cumplía las regulaciones de la Unión Europea cuando se puso en marcha.
Las reacciones al inicio de la investigación también llegaron desde el Gobierno de Aragón. La consejera de Economía e Industria, Marta Gastón, se mostró sorprendida. «No deja de ser una sorpresa que después de diez años se ponga en duda la ejecución de unas ayudas», señaló. Insistió en que seguirán trabajando para poder ampliar el plazo de 2020 como final del carbón en España.