El agua de Mazaleón vuelve a no ser apta para el consumo humano. El último análisis llevado a cabo durante la mañana del viernes ha arrojado un resultado positivo de la bacteria Clostridium, por lo que el Ayuntamiento ha alertado a la población mediante un bando de que el agua no es potable. Por todo ello, el consistorio ha procedido al reparto de agua mineral embotellada entre las 12.00 y las 14.00. El reparto se lleva a cabo en la Cooperativa de Mazaleón e incluye agua de boca suficiente para todo el fin de semana. Está previsto que el lunes se vuelva a proceder a la entrega de agua mineral. No obstante, si la población necesitase más agua, se encargaría un nuevo lote. «Hemos adquirido un lote de agua mineral más que suficiente. Tenemos ya menos población flotante pero aún así si viésemos que necesitamos más agua, la encargaríamos esta misma tarde», ha explicado Rosa Orona, alcaldesa de Mazaleón.
Está previsto que el próximo martes se lleve a cabo un nuevo análisis por lo que, como mínimo, hasta ese día se mantendrá la calificación del agua como no potable. Mientras tanto se está llevando a cabo la hipercloración de toda la red de abastecimiento. Pese a que el agua no es apta para su ingesta directa, sí se puede utilizar para usos sanitarios y riego. Es la segunda vez que los vecinos de Mazaleón deben de restringir el consumo de agua potable en lo que va de verano por la misma causa.
Pese a que se desconocen las causas de la aparición de esta bacteria desde el consistorio apuntan al intenso calor de los últimos días como una de las principales causas. Esta bacteria tiene su optimo de aparición y reproducción en torno a los 40ºC de temperatura. La bacteria comienza a destruirse en exposiciones prolongadas a partir de 80ºC y desaparece al hervir el agua. De igual modo el escaso caudal del Matarraña y el agua procedente del desembalse de Pena podrían favorecer la aparición de la bacteria.
Asimismo, desde el Ayuntamiento subrayan que actuarán en los depósitos municipales ya que su exposición al sol provoca que el agua adquiera una mayor temperatura durante estos días. A corto plazo la esperanza está puesta en el descenso de temperatura y las previsibles lluvias que se producirán durante el fin de semana y que podrían provocar un considerable aumento del caudal en el actualmente exiguo nivel que presenta el río Matarraña y sus afluentes.