En la soleada tarde de este Viernes Santo en la que gorras, gafas de sol y el buscar hueco entre los escasos lugares con sombra han sido innegociables para los asistentes, la representación del Drama de la Cruz ha cumplido de forma notable con su 46 edición con el monte Calvario de Alcorisa como emplazamiento principal. El contraste de la tierra arcillosa, la piedra y el matorral han permitido a la gran marea de espectadores que se han acercado el disfrutar de uno de los momentos más destacados y elaborados de la Semana Santa de esta localidad del Bajo Aragón.
El sermón de Cristo (interpretado por primera vez este 2023 por el local Iván López) desde el faldón del calvario frente a la plaza José Ángel Azuara ha supuesto la primera de las tres escenas. Justo en esa placeta -ubicada frente a la entrada del polideportivo de Alcorisa, y desde mucho antes del inicio de la representación, decenas de vecinos de todas las edades han centrado su atención -tanto de pie como sentados en las aceras- al desarrollo de la historia marcado por escenas como las propias enseñanzas del mesías mostrando «el camino del señor», la última cena, la traición de Judas o la cruel flagelación de Jesús de Nazaret.
Ascenso al Calvario y Crucifixión
La representación ha continuado con su segunda escena, el vía crucis natural de Cristo ascendiendo hacia lo alto del Calvario con un madero en los hombros, tal y como solían ser los castigos de los romanos allá por el siglo I. Ya en lo alto del monte, se ha desarrollado la escena final de la crucifixión, siendo esta también la más llamativa y reconocible del Drama. En este contexto, el silencio se apoderó del lugar cuando la guardia romana fijaba los cuatro clavos en los manos y pies de Cristo y los otros dos ajusticiados, Dimas y Gestas.
Finalmente, el Drama culmina con el solemne descendimiento de Jesús de Nazaret tras su muerte en la cruz y los lamentos de la Virgen María. Una caracterización difícil de describir y muy bien reflejada en las lágrimas de algunas personas que han acudido de público hasta Alcorisa. «Ha sido brutal, ahora mismo no tengo palabras. Antes de salir sí que estaba nervioso, pero luego me he relajado al ver que todo salía», exponía visiblemente emocionado Iván López pocos minutos después de terminar su actuación y todavía con los atuendos de Cristo sobre su cuerpo. «Había visto el Drama de la Cruz desde muchas otras perspectivas nunca subido a la Cruz. Estoy muy contento», añadía Carlos Yeguas, amigo de Iván y actor que ha caracterizado al ladrón Dimas.
Grandes novedades
La actuación ha destacado este 2023 este año por la instalación de tres pantallas gigantes, que han permitido a los espectadores disfrutar con mayor comodidad en la mayor parte de una representación que involucra a unos 300 vecinos del municipio (en torno al 10%). Más de 45.000 watios de sonido, 500 metros de fibra óptica, 8 videocámaras y un equipo de 25 técnicos han sido empleados para que la representación, que se desarrolla en un escenario de más de 20.000 metros cuadrados, se pudiera seguir también a través de tres pantallas gigantes y por streaming.
Jorge Martín, presidente de la Asociación Cultural Drama de la Cruz, ha hecho una valoración positiva pese al surgimiento de algún que otro inconveniente con este despliegue en la técnica que ha impedido funcionar a las dos pantallas gigantes colocadas en el calvario en la escena final tras un apagón eléctrico. «Ha salido muy bien quitando ese pequeño percance tecnológico que hemos podido solventar. Cosas del directo. Estamos muy satisfechos con el día y ya estamos pensando en la 47 edición», destacó Martín. «Ver que todo sale tan bien y que la gente lo valora es muy emotivo», añadió.
Asimismo, cabe destacar también el gran despliegue de autoridades presentes en esta representación alcorisana. Más allá de la corporación municipal, algunos de ellos son Felipe Faci, consejero de Educación, Cultura y Deporte en el Gobierno de Aragón, Tomás Guitarte; diputado nacional por Teruel Existe; Mayte Pérez; consejera de Presidencia en DGA y secretaria general del PSOE en Teruel; Joaquín Juste, presidente provincial del PP en Teruel y Luis Peralta, presidente de la Comarca del Bajo Aragón.
Los orígenes, casi medio siglo atrás
Con el arranque de la Transición en 1978, un grupo de treinta jóvenes alcorisanos, que por entonces se reunían en torno al Club Juvenil, fueron los responsables de la primera representación, llevados por su afición al teatro y conscientes del marco tan privilegiado que representa el monte Calvario de la población.
Nació sin vocación de continuidad, pero la reacción de los dos centenares de alcorisanos que fueron testigos de la puesta en escena de La Pasión, resultó clave a la hora de plantear nuevas representaciones. Además, el escenario natural en el que se realiza la obra le confiere una personalidad propia, que atrae cada año no sólo a vecinos del municipio y la comarca turolense, sino también a visitantes de fuera.
Como se ha hecho a lo largo de los 45 años de vida de la obra, en la edición de este año los papeles principales serán representados por gente del pueblo. A lo largo de las más de 4 décadas de vida, han sido en torno a 250.000 las personas que han visto la representación en algún momento (seguramente muchas más), llegando a picos de hasta 10.000 espectadores en determinadas ediciones.