El quinteto Arzz Collective sumergió a casi un centenar de asistentes en un viaje en el tiempo hasta la década de los años 50 para descubrir o redescubrir el estilo hardbop, con referencias al blues y góspel. «Dentro del jazz, es lo que se hacía en el sello discográfico Blue Note, y nosotros rendimos homenaje a esos músicos y compositores», ha explicado Dani Escolano, contrabajo de la agrupación. «Un jazz súper asequible para el público y muy divertido de tocar», ha añadido.
Fernando Lleyda (saxo tenor), Fran Gazol (batería), y Alejandro Esperanza (piano) son el resto de músicos que conforman el grupo, que el sábado contó con un invitado muy especial, el joven trompetista Joan Mar Sauqué.
Durante los 90 minutos que duró su actuación el público disfrutó del talento de la agrupación, respetando en todo momento las medidas de seguridad. Además debido a la buena sonoridad del teatro, el quinteto decidió tocar es acústico, «normalmente tocamos con microfonía, pero el sonido era tan bueno es este espacio que hemos decidido hacerlo en acústico», ha señalado Escolano. La ovación del final hizo que Arzz Collective regalara al público del Teatro de Alcañiz un bis más largo. Tanto la gente como los músicos terminaron encantados tras el concierto.
Algunos de los componentes ya se habían subido anteriormente a ese escenario como músicos en obras de teatro, pero que era la primera vez para el conjunto Arss Collective, formación cuyo nombre se refiere a Aragón (Ar) y al jazz (zz). Y para cuya formación se inspiraron en otros grupos de Comunidades Autónomas donde el jazz está muy arraigado como Cataluña o País Vasco. «Queríamos que los jóvenes tuvieran alguien en quien inspirarse», ha señalado el intérprete.
Proyecto Jazz for kids
Hace 7 años nació el proyecto Jazz for Kids, coordinado por Dani Escolano. Su objetivo es acerca este estilo a los más jóvenes y responder a la demandas por aprender este estilo de música en Aragón. Actualmente tienen 50 alumnos que quieren formarse en el jazz profesionalmente, y así evitar que se vayan a otras Comunidades Autónomas.
En 2017 el proyecto incorporó un departamento de promoción internacional para que los alumnos pudieran tener experiencias fuera de nuestras fronteras. Actualmente tiene a 50 alumnos que quieren formarse en el jazz profesionalmente. Para poder acceder a este proyecto es necesario estar matriculado en algún centro musical de Aragón, o tener un mínimo nivel musical y tener entre 9 y 18 años. La formación se divide en tres niveles: el primero para los alumnos más jóvenes con nociones musicales básicas para comenzar a estudiar jazz e improvisación; el segundo nivel es para jóvenes que tengan un buen dominio técnico de su instrumento, el objetivo es que comiencen a dominar el blues o la improvisación. Por último, el tercer nivel incluye a alumnos con muy buen dominio técnico, a los que preparan para una posible prueba de acceso a un Conservatorio Superior de jazz.
Además de formar a futuros músicos, este programa «también queremos crear público para que en los próximos 10 o 20 años tengamos gente que quiera venir a ver los conciertos», ha indicado Escolano.
El Festival de Jazz del Bajo Aragón bajará el telón el próximo sábado 30 de octubre con la actuación en Puigmoreno, tras realizar paradas en Valjunquera, Valdetormo, Monroyo, Torrecilla de Alcañiz, Valdealgorfa y el propio Alcañiz el sábado.