El VIII Concurso de Cuentos de Navidad de Radio La Comarca, patrocinado por Forestalia y Oxaquim, ya tiene ganador. Atxer Garrido, del CRA Alifara de Ráfales se ha alzado con el primer premio gracias a su cuento «La llave mágica», en el que visibiliza a través de un curioso relato su preocupación sobre la situación de las niñas en Afganistán y su deseo de que puedan volver a ser simplemente niñas.
Por su parte, Esteban Vives, del colegio CRA Tastavins de Monroyo ha obtenido el accésit con «Anoche tuve un sueño», que narra cómo los niños de la zona consiguieron iluminar las chimeneas de las Centrales de Andorra, Aliaga y Escucha. Ambos ganadores recibirán sus premios el próximo 5 de enero, víspera de la llegada de sus Majestades los Reyes de Oriente.
En esta nueva edición han participado casi 300 alumnos de 5º de Primaria de un total de 26 centros educativos del territorio, utilizando la imaginación, originalidad y alegría como protagonistas en cada uno de los relatos. Estas historias han cobrado vida gracias a la voz de varios miembros del Grupo de Comunicación La Comarca y colaboradores.
Era 5 de enero, todos los niños y niñas preparaban las cartas de los Reyes debajo de los árboles de Navidad. Los Reyes también se preparaban para salir a repartir regalos. Ellos también estaban muy emocionados, porque les gustaba hacer felices a los niños.
Al caer la noche, los Reyes montaron en sus camellos cargados con sus grandes bolsas de regalos. Pasaron por todos los continentes, países, ciudades, pueblos y aldeas, repartiendo monopatines, muñecos, legos…
Al acabar cuando volvían a casa Melchor dijo:
¡Baltasar, Gaspar!
¿Qué pasa?
¡Nos hemos olvidado de un país!
¿De cuál?
¡De Afganistán!
Y Gaspar dijo:tranquilo Melchor, lo tenemos de camino a casa.
Melchor, Gaspar y Baltasar sabían que los talibanes habían llegado al país hace poco y que a las niñas no les dejaban salir a las calles solas, ir al cole, hacer deporte…
Al llegar al Afganistán comprobaron que los niños seguían pidiendo monopatines, videojuegos, camiones de juguete…pero las niñas pedían salir del país, que los talibanes se vayan. Así que volvieron a su guarida a pensar qué podían hacer.
Al final, como les quedaba poco tiempo, crearon unas llaves mágicas que funcionaban de la siguiente manera: cuando una niña se sintiese sola, triste o con ganas de aprender, sólo tenía que abrir una puerta cualquiera y aparecería en una pequeña ciudad llena de escuelas y niñas alejadas de los talibanes. Fabricaron cientos y cientos de llaves, incluso miles y le dieron una a cada una.
Al repartir todas sus llaves se fueron a su guarida orgullosos de su trabajo. Como este tema les interesó mucho se pusieron a investigar con las tablets que habían sobrado.
Descubrieron que las mujeres no pueden salir de casa sin un hombre y tampoco podían salir sino iban totalmente tapadas y si las mujeres descubren sus tobillos serán condenadas a azotes en público. También descubrieron que no pueden cerrar tratos con comerciantes masculinos, y tampoco pueden ser atendidas por sanitarios varones. Pero lo que menos les gustó fue que tuviesen prohibida la educación.
Bueno, así pasaron los días y las semanas buscando información, visitando la pequeña ciudad y haciendo algún regalo que otro para el año que viene. Cuando pasaron uno o dos meses una de esas veces que los Reyes visitaban la pequeña ciudad pasando por los coles más grandes se dieron cuenta de que en el centro de la ciudad habían tres torres que estaban pintando unas niñas. En el centro había una plaza y los reyes fueron a ella. Por el camino se dieron cuenta de que todas las escuelas estaban cerradas y que no había ninguna niña por ninguna parte. Al llegar vieron la plaza desierta y las niñas que estaban pintando habían desaparecido. De repente miles de niñas salieron de multitud de escondites y gritaron: ¡Sorpresa!.
Los Reyes se quedaron asombrados. Habían construido una torre para cada uno. Melchor, Gaspar y Baltasar estaban tan agradecidos que los cuatro siguientes días solo hicieron juegos en los coles. A partir de ese día los Reyes vivían en sus tres torres fabricando regalos para el año que viene. Así que, si alguna vez los Reyes te regalan una llave mágica, no dudes en guardártela pero cuando estés solo.
¡FELIZ NAVIDAD!
Escucha ‘La llave mágica’ aquí:
Los vecinos de muchos pueblos de Teruel estaban preocupados. Además de cerrar la térmica de Andorra, la gripe aumentaba; ahora venía la demolición de la chimenea, símbolo de la provincia de Teruel.
Se cerraron las minas de carbón y las centrales de Aliaga, Escucha y Andorra. Los mineros quedaron sin trabajo, camioneros, conductores de autobús, carpinteros, electricistas, albañiles, panaderos… cada día vivía menos gente en los pueblos. Llegaba la Navidad y los niños de Andorra tuvieron una idea: aquella Navidad era la última para la chimenea de la térmica que nunca dejó de esta iluminada con sus luces rojas. Pidieron a sus padres que adornaran la gran chimenea con adornos navideños para la Nochebuena. Como la central siempre había producido luz que repartía por los tendidos eléctricos, podían volver a conectar estos tendidos para que aquella noche lucieran todos los adornos navideños.
Los padres no dijeron que no a la idea de sus hijos, pero ya sabían que los tendidos eléctricos ya no tenían luz y era imposible conectar.
Los niños de Andorra llamaron a los de Escucha y a los de Aliaga. Todos los pueblos mineros se ofrecieron para ayudar a engalanar las chimeneas de las tres térmicas. Pero los mayores los sabían, por aquellos cables no había corriente eléctrica. Los pueblos no tenían dinero ni corriente para encender los adornos.
En Estercuel todos los padres y gente mayor voluntaria de todos los pueblos no encontraron solución al problema de la luz.
El día 24 todos los pueblos quedaron vacíos de gente y todas las casas vacías de adornos navideños.
Los niños reían de emoción, los mayores estaban tristes porque sin los adornos de aquella noche mágica los niños llorarían.
Las tres chimeneas quedaron muy bonitas con sus adornos. Solo faltaba esperara medianoche para verlas con sus luces de colores encendidas. A menos cuarto los tres alcaldes comenzaron sus discursos dando las gracias a los niños pero les dijeron que lo importante eran las ideas con corazón, si algo iban mal y si las luces no se encendían no pasaba nada porque siempre podía salir algún problema. Los niños aplaudieron pensando que era una broma. A las 12 de la noche del día 24 de diciembre del año 2021 las chimeneas de las centrales térmicas de Andorra, Escucha y Aliaga se vistieron de colores adornando media provincia de Teruel. Las televisiones ofrecieron el acto en directo y lo pudo ver todo el país. Y el rey lo anunció en su discurso.
Al enterarse los directivos de las empresas llamaron deprisa a sus encargados y estos aseguraron todos que las líneas estaban cerradas, que era imposible, que nada de corriente eléctrica había entrado en las instalaciones. ¿Qué ocurrió?, ¿los mayores volvieron a hacer funcionar las centrales aquella noche para iluminar las chimeneas?, ¿o quizás la gran ilusión de todos los niños tiene tanta fuerza como para iluminar aquellas chimeneas durante aquella noche mágica? La verdad es que nadie lo sabrá jamás.
Escucha ‘Anoche tuve un sueño’ aquí:

