The Silent Route contará en breve con un nuevo atractivo turístico. El mítico autobús de línea ‘El Caimán’ que desde hace décadas une Cantavieja con Alcorisa tendrá una réplica a estilo photocall, para rememorar su pasado y dar a conocer su historia. El proyecto en el que está trabajando la Comarca del Maestrazgo, en constante comunicación con Andorra Sierra de Arcos, se enmarca dentro de las iniciativas que se han ido desarrollando a lo largo de los últimos años para potenciar esta ruta que de por sí es uno de los revulsivos turísticos más importantes del territorio.
Junto a la cabra montesa de Ejulve -logotipo de la Silent Route-, que es frecuentada por miles de turistas cada año, se recupera el autobús en una de sus versiones más antiguas como un icono más de la ruta de 63 km de la A-1702. «Es un autobús que lleva años haciendo la ruta por esta carretera y ha tenido muchos momentos álgidos como fue el asalto por los maquis», destaca Cristina Mallén, técnico de turismo de la Comarca del Maestrazgo. «Espero que a los visitantes les guste. Queremos poner en valor esta carretera que poco a poco a lo largo del tiempo se ha ido mejorando con importantes inversiones. Es fundamental para los que aquí vivimos y para los turistas», añade por su parte el presidente de la comarca, Roberto Rabaza.
Para su implementación, que se espera sea antes de Semana Santa, se ha buscado un sitio adecuado a cuatro kilómetros del cruce del Puerto de Cuarto Pelado, pasada la Cañada de Benatanduz, donde termina la carretera A-1702. La réplica del autobús, a escala casi real será colocada en un ensanche de la carretera. «Se colocara en forma de «L» para que la gente pueda pasar por detrás, asomarse por las ventanillas y hacerse la foto en el mítico autobús», matizan desde la institución comarcal. Lo cierto es que ‘El Caimán’ ha tenido varios modelos de vehículo a lo largo de sus años de funcionamiento, y en este caso se va a reproducir uno de los más antiguos. Entre otras características será de color verde, motivo de su apodo. La parte delantera del autobús rememora una de las segundas versiones del vehículo, no siendo tan alargado como el primero. «Se conservan fotografías en blanco y negro y el que nos sirve de modelo para la réplica», matiza Mallén.
Para llevar a cabo este proyecto la comarca del Maestrazgo cuenta con la financiación de un FITE de 90.000 euros. Poco menos de 20.000 se destinan a la reproducción de ‘El Caimán’ mientras el resto de la cuantía se utiliza para otro proyecto de señalización turística que también está en marcha. De la réplica del autobús se encarga la empresa Architecnica Creativos, la misma que realizó la reproducción de la cabra montesa.
Adecuación del espacio
Se plantea también una adecuación del espacio alrededor de la réplica del autobús para crear una zona de descanso habilitando varias mesas, bancos y una zona de aparcamiento. Esto permitirá al visitante no solo parar con tranquilidad para hacerse las fotos sino disfrutar del entorno de montaña. Cabe destacar que el atractivo se sitúa junto al punto del nacimiento del río Cañada.
En breve se comenzará con la cimentación que será la base de la réplica de ‘El Caimán’, además se procederá a la mejora del acceso y la habilitación del aparcamiento. También se realizarán trabajos de limpieza y desbrozado en la zona, todas ellas pequeñas actuaciones que durarán «dos o tres meses», según estimaciones de la comarca del Maestrazgo.
Asalto al ‘Caimán’
The Silent Route es una carretera con historia. La del ‘Caimán» es una de ellas y como tal aparece reflejada en su página web junto a antiguas fotografías del autobús. Entre otros fue documentada por el historiador Juan Manuel Calvo Gascón.
El ‘Caimán» se puso en funcionamiento en la década de 1930 y no fue hasta los años 50 cuando contó con servicio de ida y vuelta entre las localidades de Alcorisa y Cantavieja. A las 16.00 del 17 de febrero de 1948 realizaba su recorrido habitual, cuando en la carretera de Villarluengo a su paso por la ‘Cuesta de los Degollados’ sufrió un asalto por parte de los maquis, miembros de la denominada Agrupación Guerrillera de Levante y Aragón, cuyo eje de actuación se situó en el Maestrazgo.
Se trataba de soldados republicanos españoles que habían combatido contra los nazis en Francia, que tras el fracaso en el Valle de Arán de la gran operación conocida como ‘Reconquista de España’ del año 1944, llegaron a la sierra Ibérica para «recomponer» la resistencia contra el franquismo.
Durante el asalto al ‘Caimán’ se produjo un tiroteo con la pareja de la Guardia Civil que realizaba diariamente el recorrido mezclada entre los pasajeros. Uno logró escapar mientras el otro fue reducido por los asaltantes, que habían impedido el paso del autobús cruzando un pino en la carretera. En los hechos se vio involucrado también Antonio Pérez Escorihuela, teniente de alcalde de Villarluengo y «afecto al régimen» que en ese momento transitaba con su vehículo particular. Le acompañaba el practicante de la localidad, Antonio Conesa.
Pérez fue retenido por los atacantes y llevado al monte donde le dispararon varias veces dándolo por muerto. El último tiro que recibió le destrozó un ojo. Sin embargo, éste gravemente herido, sin visión, estuvo deambulando a la intemperie de la fría noche de invierno hasta que fue localizado por una patrulla que estaba trabajando en la captura de los «bandoleros» (término utilizado por el franquismo para denominar a los maquis). Salvó la vida. Se desconoce si fue protagonista casual de lo sucedido al encontrarse con el asalto al «Caimán», o si cayó en una emboscada organizada por los maquis para atentar contra él por su condición de fiel servidor del Régimen.
Esta línea sigue funcionando, todos los días de lunes a viernes, y la sigue realizando un autobús de la empresa Altaba, llamado todavía «El Caimán» en memoria de aquel viejo autobús.
Me parece totalmente fuera de lugar el sesgo ideológico de este artículo. Así no .