La plaza de los Artistas de la capital cultural del Matarraña luce desde este fin de semana una nueva placa. Se trata de una obra de la ceramista calaceitana Teresa Jassá, una de las artistas del Bajo Aragón Histórico más conocidas nacional e internacionalmente. El Ayuntamiento de Calaceite organizó el viernes una jornada sobre la ceramista coincidiendo con los 20 años de su fallecimiento. Durante el acto se puso en valor la figura de la ceramista y el importante legado cultural que dejó en sus más de 35 años de actividad creativa. La jornada contó con la presencia de más de 150 personas entre las que se encontraban los descendientes de Jassá así como varios de sus exalumnos. «Pensábamos que faltaba una placa en honor a una artista a la que es imposible dejar de referirnos cuando hablamos de Calaceite y que ha sido referente para todos nosotros», explicó Jose Manuel Anguera, concejal de cultura y teniente-alcalde del ayuntamiento de Calaceite.
El acto contó también con varias personalidades del mundo cultural matarrañense y bajoaragonés que protagonizaron una mesa redonda tras la inauguración de la placa. El ceramista alcañizano Fidel Ferrando destacó la originalidad de su obra. Cabe recordar que Jassá fue una de las pocas artistas que plasmó sus obras en cerámica y de forma artesanal, por lo que no existen dos obras idénticas creadas por la artista. «Estuve trabajando con ella 4 años y recuerdo que siempre decía que cada obra tenía un código de colores diferente, por lo que cada obra es única», añadió Anguera. Por su parte el historiador Carles Sancho fue el encargado de hablar de su faceta más política. Allí se puso de manifiesto su carácter abierto y su faceta de mujer adelantada a su época. Jassà fue una de las socias fundadoras de la Asociación de Mujeres Kalat-Zeyd y fue además concejal de cultura del consistorio calaceitano entre 1983 y 1987 por el Partido Socialista. Asimismo, la profesora de lengua y literatura Mercé Gimeno habló de la obra literaria de Jassá y leyó algunos poemas escritos por la artista durante varios momentos del acto. Asimismo, el acto contó con la presencia de varios descendientes de Jassà así como de sus ex-alumnos.
De igual modo la localidad exhibe 35 de sus obras en una exposición permanente sobre la ceramista que se encuentra en la oficina de turismo puesta en marcha en 2016 en la histórica Casa Bruno. Los caprichos de Goya, el arte religioso, Don Quijote, la maternidad, Juan Cabré, su tío el artista Santiago Vidiella y las características palomas de la paz son solo algunos de sus temas principales. Durante toda su etapa creativa destacó por su popularidad, especialmente entre visitantes y viajantes que paraban en la localidad en sus habituales viajes a la costa o al valle del Ebro en la N-420. Por ello son muchos los particulares, especialmente zaragozanos y catalanes, que tiene buena parte de su obra. El próximo objetivo, explicaron desde el consistorio, es catalogar el máximo posible de su extensa obra. La artista nació en Calaceite en 1929. Estudió cerámica en la Escuela de Bellas Artes de la ciudad francesa de Perpiñán entre 1957 y 1960 y en 1961 regresó a su villa natal.