Continúan las reacciones ante la posibilidad de rescisión del contrato con la UTE
Las reacciones ante las declaraciones del viernes del Consejero de Sanidad sobre la posibilidad de de que se rescinda el contrato del Hospital de Alcañiz se siguen sucediendo. Ayer, El secretario de Organización de Ciudadanos Aragón, Ramiro Domínguez, pidió al Gobierno de Javier Lambán que «deje de reírse de los bajoaragoneses» y ponga en marcha el nuevo hospital de Alcañiz. «Ya está bien de excusas. Cuando el problema no es la empresa, es el dinero y sino el modelo. Que negocien con la compañía y lo arreglen, que para algo son los que gestionan», ha aseverado.
Recordó que el Grupo Parlamentario de Ciudadanos en las Cortes de Aragón ha presentado una enmienda al Proyecto de Ley de Presupuestos de 2018 en la que solicita destinar 7,5 millones de euros para la puesta en marcha de la construcción del hospital de Alcañiz.
«Se está poniendo en riesgo el acceso a la sanidad de los vecinos de este territorio. Este es un hospital altamente demandado y muy necesario. Si el Gobierno de Aragón no lo cree así, que vengan a ver las instalaciones sanitarias de la zona», aseveró.
Además, explicó que pedir la reprobación de Celaya «no es el quid de la cuestión» porque, aunque abandonara el Ejecutivo, «todo el equipo de gobierno es igual de responsable de que Alcañiz no tenga el hospital que necesita».
Por su parte, el portavoz de Ciudadanos en el Bajo Aragón, Joaquín Galindo, recordó que al PSOE «se le llenó la boca con el hospital desde la campaña electoral de 2015 y desde entonces solo hemos tenido promesas incumplidas».
En ese sentido, también subrayó que este no es el único agravio que el Bajo Aragón ha sufrido por parte de la Consejería de Sanidad, pues en 2017 «Celaya tuvo la brillante idea de mandar al hospital de Alcañiz un aparato de rayos de segunda mano totalmente analógico, tratándonos como ciudadanos de segunda».