Hasta 46 pueblos de los 51 que recibieron ayudas del Fondo de Inversiones de Teruel (FITE) en 2017 han tenido problemas en la justificación. El Gobierno de Aragón exige a la mayoría de los pueblos beneficiarios la devolución de esta subvención alegando falta de autorizaciones en proyectos varios. Plazos ajustados -apenas cinco meses para todo- ha hecho que en casi todos los pueblos que recibieron la ayuda se haya pedido su devolución, o parte de ella, al haber justificaciones fuera de fecha. Le sucedió a Jatiel pero también a municipios vecinos y de mayor población como Híjar o Albalate del Arzobispo. Se les requiere la devolución de parte o total de la ayuda porque la justificación de la obra no incluía el boletín de alta eléctrica de la instalación para la que se había solicitado el dinero.
Varios consistorios han alegado o están en vías, y otros como el de Híjar ya decidieron que recurrirán a la vía judicial.
Un escenario complejo se les presenta a los ayuntamientos más pequeños como es el caso de Jatiel, localidad que no alcanza el medio centenar de habitantes censados. En este caso se les requiere la devolución de más de 40.000 euros «a los que se añaden los intereses», una cifra que supone más de la mitad del presupuesto anual del pueblo que lo llega a los 80.000 euros. «No estamos de acuerdo con que se impongan estas sanciones, siempre hemos cumplido con todo y nos parece demasiado», dijo el alcalde, Jesús Gálvez, que no ocultó su enfado con la situación. «Es mucho dinero para nosotros, para un ayuntamiento muy pequeño cuyos ingresos se reducen al cobro del IBI y los impuestos de cuatro coches contados», apuntó el primer edil, que lamentó que los pueblos «tengan las mismas necesidades que los grandes pero muchos menos recursos».
El dinero que recibieron del FITE de la partida en cuestión se destinó a construir un nuevo depósito. Era una obra muy reivindicada y para la que habían solicitado ayudas en numerosas ocasiones hasta que, al fin, y tras quedarse fuera de varias líneas de subvención, llegó el Fondo. Jatiel, como todos los pueblos, incrementa su población en verano. Al incremento de demanda de agua se añadía la obsolescencia del depósito operativo en ese momento y de toda la red que conservaba los tubos colocados hace 70 años. El agua dispensada era de calidad pero mucha se perdía por la infraestructura obsoleta. El nuevo depósito ya está en funcionamiento y la idea es que opere de forma simultánea con el antiguo pero antes deberá someterse a los arreglos oportunos. «¿Con qué dinero? Veremos», se preguntó Gálvez. «Cuando pedimos una ayuda es para necesidades que muchas veces son urgentes. Tenemos que mantener los servicios y un ayuntamiento pequeño si no es con ayuda, no puede», recordó.
Freno a otros servicios
Jatiel se suma a los ayuntamientos que están en vías de alegar para tratar de frenar esta devolución. No obstante, esta situación ya ha tenido efectos porque ha desbaratado algunos planes que tenía el Consistorio con nuevas iniciativas. Una de ellas, es la colocación de contadores «inteligentes» que calcule el consumo real de cada casa. «No es justo que sea a un tanto alzado y que todos paguemos lo mismo tanto si la estancia en el pueblo es de todo el año como si es de un mes o cuatro fines de semana», comentó el alcalde. «Pero esto tendrá que esperar también», concluyó.
Aragonesa dice
Y no pueden poner contadores normales y corrientes como todo el mundo?
Jatiel dice
¿Y no pueden hacer las cosas bien y así no nos pasa esto?